Estilos que se quedan insertos en el tiempo. Imágenes de no solo prendas, sino visiones del cuerpo que a pesar de parecer efímeras, retratan el espíritu de su tiempo. Concepciones de belleza que muestran cómo evolucionó no solo la mujer, sino la sociedad. De esto trata “Coming Into Fashion, Un siglo de Fotografía de Condé Nast”, que muestra cómo a través de las décadas, la imagen femenina fue reinventándose.
A través de los primeros trabajos de fotógrafos como el legendario Helmut Newton Man Ray e Irving Penn , entre otros, la curadora Natalie Herschdorfer seleccionó lo más representativo y atemporal de su trabajo, para mostrar así cómo fue que la fotografía de moda pasó a ser una forma de arte. “No soy especialista en moda, pero lo que más me llamó la atención de estas poderosas fotografías es cómo con los mismos elementos (modelo, traje extraordinario y ambiente), se lograron cosas distintas. Y más estos fotógrafos en sus comienzos, a quienes se les pedía cosas nuevas todos los días. Esto prueba su extraordinario talento”, afirmó.
El trabajo de investigación no fue fácil. Entre ocho millones de imágenes repartidas entre Londres, Nueva York, París y Milán del gigantesco archivo de Condé Nast, se eligieron las que más pudieron condensar el espíritu de una época en particular. Y como la fotografía de moda se consolidó desde los años 20, se vieron todos los procesos por los que atravesó este arte. “Estas imágenes solo duraban un mes y luego se guardaban. Se hizo todo un proceso para dejarlas para la posteridad”, añadió Herschdofer, que entre muchas rarezas de esta inmensa colección, joya de todo amante de la moda, halló una foto de Kate Moss a sus 18 años.
Pero Moss solo es un pequeño fragmento de una exposición que cubre la historia de muchas mujeres a través del siglo XX. Durante cuatro periodos de tiempo se podrá ver cómo la moda hizo que las mujeres pasaran de ser sujetos/objetos decorativos a ciudadanas con voz y voto. Del corsé y los vestidos que fomentaban el ocio y la quietud, se pasó al movimiento que dio pie a la liberación femenina en ámbitos como lo laboral, lo político y sexual. De las curvas a lo andrógino y de lo señorial a lo juvenil, hasta lo contemporáneo, donde todo se funde en la versatilidad y el eclecticismo. De esta manera, el Franz Mayer muestra a la moda, por primera vez en México, como parte fundamental de la sociedad occidental y cómo ayudó en sus cambios y procesos.
“Curiosamente, Franz Mayer fue fotógrafo. Y nosotros consideramos la fotografía una forma de arte. Por eso estamos complacidos de contar con esta grandiosa exposición en el museo”, afirmó Héctor Rivero Borrell, director del Museo, que dispondrá para el público un siglo de moda en el que podrá reconocerse a través del pasado, presente y futuro.
Cuándo y dónde
La exposición estará disponible hasta el 11 de octubre. El Museo Franz Mayer está ubicado en Hidalgo 45, Centro Histórico
También puedes leer
