Te pones a dieta, haces ejercicio, reduces el azúcar pero sigues sin bajar de peso; ¿cómo resolver el misterio?. Platicamos con la mutrióloga Adriana Angélica Ángeles Quezada de la Clínica CEREBRO quien nos detalló que las hormonas pueden estar detrás de esta imposibilidad para perder peso.
Las hormonas viajan a través del torrente sanguíneo hacia los tejidos y órganos. Surten su efecto lentamente y, con el tiempo, afectan muchos procesos distintos, que incluyen: el crecimiento y desarrollo, metabolismo, función sexual, reproducción y estado de ánimo, declaró la especialista.
Bajo la lupa
Estas son dos de las hormonas que pueden estar detrás del aumento de peso:
Cortisol. Una hormona liberada en respuesta a situaciones de estrés, activa la liberación de glucosa, grasa y suprime el sistema inmunitario; actualmente se ha reportado que el incremento en el nivel de cortisol por un periodo largo de tiempo promueve ganancia en el peso corporal.
El ritmo de vida actual, puede estar ocasionándote la exposición a periodos prolongados de estrés, por lo cual si estás buscando reducir tu peso corporal es importante disminuir estrés y realizar actividades que permitan relajarte, hacer ejercicio regularmente, practicar yoga, sesiones de aromaterapia, masajes relajantes pueden ser buenas opcione
Melatonina. Funciona como reguladora del reloj biológico del organismo, su activación se produce en periodos de noche u oscuridad, por lo cual si mantienes tu espacio iluminado durante la noche o en oscuridad durante el día, se puede promover un desequilibrio de melatonina, la regulación en los niveles de esta hormona pueden ayudar en el control de peso, incluso investigadores de la Universidad de Granada en España creen que la melatonina puede prevenir enfermedades cardiacas, así como disminuir el colesterol LDL, y aumentar el HDL.
Ahora ya sabes que además de poner atención en tu alimentación y el ejercicio, es importante cuidar aspectos como la relajación y el descanso diario para cumplir el objetivo de perder peso corporal.
