Así se defendió el gobierno por las críticas del caso Ayotzinapa

ExpandirReproducción automática

1 de 23

El Gobierno mexicano defendió hoy su papel en las investigación sobre la desaparición de 43 estudiantes ante las críticas de los padres y compañeros de las víctimas, quienes afirman que las instituciones oficiales han sido “rebasadas” por la situación.

“El presidente de la República ha ejercido un liderazgo respecto a las acciones que el Gobierno ha desplegado con motivo de estos lamentables hechos”, afirmó el portavoz presidencial, Eduardo Sánchez.

Al ser interrogado en rueda de prensa sobre por qué el presidente Enrique Peña Nieto no se ha desplazado a Iguala, donde los 43 estudiantes de una escuela para maestros desaparecieron el pasado 26 de septiembre, Sánchez replicó que el mandatario “prácticamente no se ha separado del seguimiento de esta investigación”.

“Ha tenido juntas constantes con todos sus colaboradores con este propósito. Y ha puesto la mayor de las atenciones en lo que está ocurriendo en el país respecto a este tema. Su compromiso es no dar espacio a la impunidad, dar con los responsables, localizar a los estudiantes y esclarecer los hechos de forma que no quede ninguna duda”, abundó.

La noche del 26 de septiembre policías atacaron a tiros a estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa presuntamente por órdenes del entonces alcalde de Iguala, José Luis Abarca, causando la muerte a seis personas y heridas a 25 más.

Además, de acuerdo con la investigación, los policías detuvieron a 43 estudiantes y los entregaron al cártel Guerreros Unidos, cuyo líder, Sidronio Casarrubias, ordenó su desaparición creyendo que se trataba de miembros de Los Rojos, un grupo criminal rival.

El caso se ha convertido en la crisis más grave que ha vivido el Gobierno de Peña Nieto desde que se inició en diciembre de 2012, reconoció hoy el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio.

“Se ha dado esta circunstancia, esta situación lamentable, que no solamente a nivel nacional, sino a nivel internacional, nos ha lastimado”, declaró Osorio en una entrevista.

Confió en que el Gobierno va a superar este problema y dotar de seguridad a la región de Tierra Caliente del sureño estado de Guerrero, donde ocurrieron los hechos, para evitar que “vuelvan a darse hechos tan lamentables”.

Sobre la reunión de casi seis horas celebrada ayer en la residencia oficial de Los Pinos con los familiares de los desaparecidos, dijo que fue “muy respetuosa” y “con exigencias”, pero negó que hubiera un enfrentamiento.

Apuntó que el Gobierno entiende la decepción de los padres, quienes “nunca podrán estar satisfechos” mientras no sean hallados sus hijos.

Acerca del paradero de los jóvenes, Osorio comentó que “todos los escenarios son posibles”, pero que la prioridad es hallarlos con vida, la principal demanda de los familiares.

Consideró válidas las exigencias de miles de mexicanos que han salido a las calles a protestar por este caso, pero reprobó las manifestaciones que violan los derechos de terceros, como cuando se han atacado sedes oficiales y saqueado comercios.

En tanto, familiares y compañeros de los desaparecidos llamaron a la sociedad a movilizarse para exigir justicia.

“Las instituciones se han visto rebasadas, los tejidos están rotos, la delincuencia está por todas partes en todos los niveles de Gobierno. No podemos seguir así, tenemos muertos, mutilados”, dijo Omar García, uno de los sobrevivientes de Iguala.

En declaraciones a una radioemisora, el joven anunció que en las próximas semanas los alumnos de la Normal de Ayotzinapa recorrerán “el país en una caravana civil y pacífica para que podamos poner a debate (…) este problema”.

Asimismo, hizo un “llamado a la comunidad estudiantil, a las organizaciones sociales (…) a que se sumen a este movimiento”, que exige el retorno con vida de sus compañeros.

Por su parte, Emiliano Navarrete, padre de José Ángel, uno de los jóvenes desaparecidos, dijo estar decepcionado de la reunión de ayer de casi seis horas con Peña Nieto, de quien esperaba “más” pese al compromiso del mandatario de intensificar la búsqueda.

“Estoy igual, como al principio”, lamentó Navarrete e insistió en que no fue al encuentro con Peña Nieto a “pedir un favor” o una “limosna”, sino a “exigir justicia” porque fueron “personas del Gobierno quienes cometieron el atropello contra nuestros hijos indefensos”.

El caso ha causado reacciones no sólo al interior del país sino en la escena internacional, con pronunciamientos de preocupación de la Casa Blanca y de solidaridad del papa Francisco.

Este jueves, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pidió al Gobierno de México más avances en la localización de los estudiantes y aseguró que evaluará una propuesta para ayudar a la creación de un grupo de asistencia técnica que apoye la búsqueda.

TE RECOMENDAMOS

Chong admite que el gobierno de EPN vive su crisis más grave

Muere un policía federal en búsqueda de normalistas

Notas que fueron una mentira sobre el caso Ayotzinapa