Tras la agresión que sufrió el city manager de la delegación Miguel Hidalgo, Arne aus den Ruthen, por parte de cuatro escoltas, el Partido Acción Nacional (PAN) en la Asamblea Legislativa busca crear un padrón de guardaespaldas en la Ciudad de México para detectar a las personas que desempeñan esta labor y evitar que la delincuencia organizada opere bajo este modelo.
El presidente de la Comisión de Seguridad Pública, Gonzalo Espina, señaló que el padrón sería actualizado de manera mensual y almacenaría datos sobre la persona que funge como escolta, placas del vehículo en el que se traslada y el tipo de armas que porta y los permisos.
“En este momento es imposible ofrecer algún dato que pueda reflejar la cantidad de escoltas que hay en la Ciudad; existe la Sociedad Mexicana de Guardaespaldas que ha reportado tener cerca de 800 miembros, sin embargo, se calcula que en la Ciudad hay cerca de cinco mil elementos”, advirtió.
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Espina Miranda añadió que “el no contar con un sistema que los tenga ubicados puede generar inseguridad dado que, puede prestarse a que la delincuencia organizada pase desapercibida mediante el modelo que actualmente opera”.
También se establecería un mecanismo de certificación de escoltas para que cuenten con cursos básicos y así evitar que se genere violencia en el espacio públicos, explicó el legislador panista.
La llamada “Ley Escolta”, también fijaría reglas para las empresas que dan los servicios de seguridad privada o de escoltas para evitar abusos y excesos por parte de aquellos que se desempeñen como guardaespaldas.
Esa legislación no sólo buscaría castigos para excesos e irregularidades, sino también compensaciones fiscales para las empresas de seguridad privada y particulares que se regularicen y cumplan con cada uno de los requisitos que se fijen.
El pasado martes el director de Administración Delegacional en Miguel Hidalgo, Arne aus den Ruthen, fue agredido físicamente por cuatro escoltas de la familia Libien en Paseo de la Reforma; días antes los mismos guaruras habían sido multados en un operativo que desplegó el funcionario para hacer cumplir el Reglamento de Tránsito de la Ciudad de México.
