La apertura de la segunda parte de la versión pública del expediente del Caso Ayotzinapa por parte de la Procuraduría General de la República (PGR) -sobre la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, exhibió las dilaciones de la dependencia federal en la investigación.
La PGR tardó más de nueve meses en solicitar los videos de la Central de Autobuses de Iguala y del Centro de Control, Comando, Comunicación y Cómputo, conocido como el C-4, además de buscar posibles testimonios 10 meses después, de acuerdo a documentos oficiales.
Peritaje en la Central de Autobuses
Nueve meses después de la desaparición de los 43 normalistas, el 11 de julio de 2015, un Agente del Ministerio Público Federal, acudió a la Central de Autobuses de Iguala a realizar el análisis de las cámaras de video.
De acuerdo al folio 56230 de la averiguación previa PGR/ SEIDO/UEIDMS/01/2015 de fecha 14 de julio de 2015, “se realizó el análisis de equipo DVR de captura de video, así como de los videos que se encontraban almacenados en dicho equipo DVR de esa dependencia”.
En el apartado Desarrollo se aclara que “en las instalaciones de la Central de Autobuses de la ciudad de Iguala de la Independencia que se encuentran ubicadas en (***borrado), México, es donde se encuentra un equipo DVR en el cual se almacenan los videos grabados por las cámaras de video vigilancia que tiene instalados en diversos puntos de dicha Terminal de Autobuses. El 11 de julio de 2015 se tuvo acceso a dicho equipo DVR para la realización del estudio pericial, mediante la gestión del C. (***borrado), quien funge como ‘Supervisor de ventas’ en dicha dependencia”.
Del estudio pericial –que se llevó a cabo en las instalaciones del Laboratorio de Informática de la coordinación de Servicios Periciales- se determinó que “en la fecha del análisis, en el equipo DVR sólo se encontraron videos del 19 de junio al 11 de julio” y que “no se encontraron videos originales grabados por las cámaras en las fechas del 25 al 27 de septiembre de 2014”.
Además que “no se pudo acceder a opciones de configuración avanzada del equipo de grabación DVR, ya que para ello se requiere de la contraseña del administrador, misma que se desconoce por parte del personal de la Central de Autobuses de la ciudad de Iguala, ya que sólo la empresa que le da mantenimiento a dicho equipo DVR lo conoce”.
Un apartado íntegro de las conclusiones periciales fue tachado de la versión pública del expediente del Caso Iguala.
