Antes de la instalación de parquímetros en Polanco, Alberto llegaba muy temprano, en las mañanas, para apartar lugares en la calle Arístoteles.
Hoy este franelero sigue madrugando, pero no para adueñarse de la calle, sino de la banqueta en la esquina de Arsitóteles y Presidente Masaryk, donde cobra 30 pesos a los oficinistas que buscan evadir el pago del parquímetro y la multa de 489 pesos por rebasar el límite de tiempo, que es de tres horas, por 24 pesos.
Juan Carlos (quien no quiso ser identificado con su apellido) es supervisor de Ecoparq, empresa que opera los parquímetros en Polanco y estimó que la evasión de los aparatos podría ser de hasta 50%.
“Hay desde los que se estacionan en la banqueta, los que mueven los carros cuando pasamos a vigilar y hasta quienes les dan el dinero a los franeleros para que ellos lo depositen al parquímetro”, señaló el empleado.
“Caminar por estas banquetas es imposible”, afirmó María Teresa Ruiz, de La Voz de Polanco, asociación que desde la instalación de los parquímetros, en enero de este año, denunció que franeleros, acomodadores y guardaespaldas, estacionan autos en las entradas de casas particulares y sobre la banqueta.
Además de esto, otro problema es la transparencia. Mayté de las Rivas, coordinadora del Comité Ciudadano Chapultepec-Polanco, aseguró que la Autoridad del Espacio Público del Distrito Federal no ha informado sobre los ingresos generados por los parquímetros.
“Supuestamente se iban a transparentar las cuentas de todo lo que entraba, pero no lo han hecho. Se ha pedido que transparenten el ingreso para saber de cuánto es el 30% que se debe destinar al mejoramiento de las 10 colonias de Polanco y tampoco (lo han hecho)”, dijo la residente.
En abril pasado, la Autoridad del Espacio Público reportó que en los tres primeros meses de actividad de los parquímetros se recaudaron tres millones de pesos, cifra que contrastó con los 13 millones de pesos que según el Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP), por su siglas en inglés, se percibieron en ese mismo periodo.
Según la asociación civil Ciudadanos en Red, en colonias como Juárez y Cuauhtémoc en un año se captaron más de 80 millones de pesos por el uso de parquímetros.
Pese a la evasión y falta de transparencia, ciudadanos de la Red y el (IPTD) estimaron que a raíz de las nuevas reglas para estacionarse, el promedio de ocupación de los automovilistas en la zona pasó de seis horas a una hora y media, y que la afluencia de automóviles se ha reducido 35%.