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Cinco casos de no creerse que les ocurrieron a custodios de valores

Este miércoles, un custodio de la empresa Cometra disparó de manera accidental su arma de cargo cuando salía junto con sus compañeros de la estación Puebla, de la Línea 9 del Metro, tras recoger el dinero de la taquilla, lo que dejó un saldo de tres mujeres heridas, una de ellas, también guardia.

A propósito de este caso, les dejamos cinco casos irreales que les ocurrieron a custodios:

1.- En julio de 2012, una camioneta de la compañía Mexicana de Traslado de Valores se vio involucrada en un accidente de tránsito en el municipio de Tlalnepantla. Para evitar pagar los daños al vehículo particular, uno de los custodios sacó su arma y realizó disparos al aire con el fin de amedrentar a los tripulantes del otro auto. Fue entonces que los afectados solicitaron ayuda de elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana del Estado de México, quienes detuvieron a los custodios y les decomisaron tres escopetas y cuatro armas tipo revólver.

2.- En septiembre de 2013, un custodio de la empresa Tecnoval cometió un robo en la colonia Lorenzo Boturini, en la delegación Venustiano Carranza, en el Distrito Federal. Cuando se dirigían a entregar el dinero recolectado, Hugo Flores mintió sobre una supuesto desperfecto en la camioneta blindada y se bajó a revisar qué pasaba.

Fue en ese momento que cerró las puertas de la cabina delantera, dejando dentro a sus compañeros, quienes vieron a Flores abrir las puertas traseras y sacar nueve bolsas con dinero. Atrás del vehículo blindado, los cómplices del custodio recibió el efectivo y después escaparon.

3.- En agosto de 2014, una planeación perfecta que incluyó uniformes y una camioneta clonadas, y papelería falsificada de la empresa Tecnoval, derivó en un robo de película contra una sucursal de Bancomer, en el Centro Histórico de la Ciudad de México. Los presuntos empleados de esta compañía recogieron 10 millones de pesos en unos cuantos minutos. Los ladrones conocían los protocolos para la recolección del dinero e incluso presentaron documentación que los acreditó como miembros de Tecnoval, lo que facilitó la entrega del efectivo por parte del banco. 

4.- En octubre de 2014, un custodio de la empresa Cometra murió después de jugar a la “ruleta rusa” con su arma de cargo, en Campeche. El guardia falleció a causa de un balazo que se habría dado él mismo presuntamente cuando jugaba con uno de sus compañeros, dentro de la cabina de resguardo. Guadalupe Martín Jiménez Sánchez fue trasladado a un hospital en la misma camioneta de valores, pero murió al ingresar al centro médico.

5.- En febrero de 2015, un guardia de valores, de la empresa Tecnoval, murió dentro de la cabina de seguridad, tras dispararse con su propia escopeta. Briones Moreno, de 22 años, llevaba entre sus piernas el arma de cargo, calibre 12, con el cañón hacia arriba. Fue entonces que de manera accidental se accionó y la bala le impactó en el rostro, perdiendo la vida. La camioneta quedó frente a una sucursal bancaria que iban a surtir, en Santa María la Ribera, en la delegación Cuauhtémoc.

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