Las familias de nuestro país destinan entre 18 y 25% de su ingreso para garantizar la preparación académica de sus hijos; el problema, es que 43% no ahorra ni planea.
Oliver Ambía, director de la licenciatura en Administración Financiera del Tec de Monterrey, campus Santa Fe, te recomienda:
1. Ahorra desde este momento
Lo recomendable es reservar entre 10 y 15% de tus ingresos desde un año antes de la concepción. Lo ideal es que cada uno de los padres haga su aportación para solventar los gastos derivados de las consultas al obstetra, pediatra y, en su caso, anticiparse al desembolso derivado de la ropa, pañales y accesorios del bebé.
2. Anticípate a los gastos del parto
Compra o contrata un paquete médico de alumbramiento. En el mercado hay productos que cubren el parto o cesárea, hospitalización y medicamentos, los cuales oscilan entre 12 mil y 45 mil pesos, en promedio; el cual puedes cubrir en mensualidades.
3. Acude a tu banco
Contrata un fideicomiso educativo que te ayude a solventar los gastos derivados de la preparación básica y profesional del menor. Esta opción es viable desde que nace tu hijo o antes de que cumpla seis años. No olvides contratar un seguro de vida que te permita apoyar a tu familia en caso de que faltes.
4. Contrata para el futuro
Abre un fondo de ahorro y, si es posible, compra alguna propiedad para que la rentes y, en su momento, puedas venderla para cubrir los gastos más importantes de tus hijos.
