Luego de 20 años del asesinato del ex candidato presidencial, Luis Donaldo Colosio Murrieta, la colonia que fue el escenario del crimen, Lomas Taurinas, se mantiene aún en el desarrollo de los años 90 y una plaza y biblioteca son los principales avances de esta colonia.
Infografía: 20 años sin Colosio
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Entre los colonos de esa zona al nororiente de esta frontera, hay quienes opinan que el sector sigue siendo el mismo de ese entonces, y otros aseguran que éste continúa en crecimiento y sus habitantes trabajando por su bienestar.
Considerado como el fundador de Lomas Taurinas, el presidente de la Coalición de Colonias Populares, Agustín Pérez Rivero, dijo que al igual que todos los sectores de Tijuana, éste sigue con su vida, pero sin olvidar que un día fue la noticia del país.
Este domingo venidero, al igual que cada año, en la colonia Lomas Taurinas se revivirá de nueva cuenta el suceso que a fuerza de repetirse se ha convertido en un acto meramente político, “al que muchos vienen sólo para tomarse la foto”.
Sin embargo, el líder comunal rechazó que la celebración haya caído en el olvido o se haya vuelto deslucida con el tiempo, “es según, la disposición de quienes estén en el poder o la de los dirigentes políticos del partido al que pertenecía Colosio”.
Las nuevas generaciones residentes de esta zona, han crecido con la historia de la que fue protagonista un día su colonia debido a los relatos de sus padres y abuelos, a quienes sí les tocó vivir los momentos que los pusieron en la mira nacional.
“Lomas Taurinas nunca ha dejado de crecer y de trabajar, como desde el primer instante en el que sus colonos se asentaron en esta zona agreste e inhóspita debido a los múltiples cerros y lomas que siempre han existido, y de ahí su nombre”, dijo.
El fundador recordó que lo de “Taurinas” le viene debido a que originalmente se constituiría en los terrenos de lo que ahora es el Aeropuerto Internacional en el fraccionamiento El Taurino, propiedad de Francisco Ross Oviedo, de ascendencia española.
Sin embargo, estos terrenos, pertenecientes al ejido Tampico, en su momento fueron expropiados para la construcción del referido aeropuerto, y fueron objeto de permuta a otro predio también propiedad de Ross Oviedo.
Ahí se asentaron los nuevos pobladores de la zona que después sería conocida inicialmente como fraccionamiento Lomas Taurinas, con calles alusivas a toreros de la época, el cual, con el paso del tiempo quedó en el abandono durante 15 años.
Después de esta etapa, a través de la Coalición de Colonias Populares se solicitó al entonces gobernador Roberto de La Madrid la expropiación por causa de utilidad social de unos terrenos entre cerros, aledaños al fraccionamiento original.
“Eran cerros y tierras ociosas que nadie quería comprar, pero nosotros, ante la necesidad de mil 500 personas que no tenían casas, se solicitaron al dueño Tomás Aquino, y se hicieron gestorías por escrito, pero nunca fuimos invasores”, aseguró.
Varios años después, el 23 de marzo de 1994, durante la celebración de un mitin político fue asesinado en Lomas Taurinas el candidato presidencial del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Luis Donaldo Colosio Murrieta.
Ahora, a 20 años de distancia, sólo una plaza, una biblioteca y un centro comunitario con el nombre del sonorense, en el mismo lugar en el que fue asesinado, han persistido en el tiempo y han servido de escenario para honrar su memoria cada año.
“Eso es lo que ha quedado, y es la única transformación que se ha visto aquí en esta colonia, esas obras que se construyeron con recursos federales y que han servido a nuestra comunidad”, expresó.
“Fuera de eso, el progreso que se ha dejado sentir en la colonia Lomas Taurinas, ha sido por el propio esfuerzo de sus habitantes, y así continuará trabajando todos los días y por siempre”, manifestó el dirigente comunitario.
