Los jugadores del Bayer Munich se disfrazaron como vaqueros del “viejo oeste” para asistir a la fiesta que organizó la tenista Ana Ivanovic, novia de Bastian Schweinsteiger, y así festejar el triunfo de 2-0 sobre el Stuttgart.
La mayoría de los futbolistas adoptaron un look similar al de la película “El bueno, el malo y el feo”, pero Javi Martínez prefirió vestirse como Woody de “Toy Story”.
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