Cuando el árbitro del encuentro decretó el final del partido entre Atlas y Toluca, un sector de la parcialidad rojinegra, específicamente la Barra 51, comenzó a corear al Capitán del equipo.
“Olé , olé, olé, olé, Cufré, Cufré”, sonó desde la tribuna norte. El Capitán argentino se acercó a la tribuna conmovido, y arrojó su camiseta en agradecimiento.
Leandro Cufré reconoció, minutos después, que lloró ante la emotiva despedida que se improvisó al término del encuentro.
“La verdad que fue muy emotivo, se me cayó alguna lágrima, pero no está dicha la última palabra, siempre estaré agradecido con esta institución más allá de lo que suceda”, expuso el argentino.
Sin querer, Cufré habla de su paso por Atlas como si fuera un ciclo cerrado, aunque admitió que nada está escrito en relación a su continuidad.
“Vine con un objetivo muy claro y cumplí. Cuando me llamaron, el tema del descenso estaba complicado, había problemas económicos y demás, nos metimos en Liguilla en estos dos años y medio que estuve… que estoy acá y estoy feliz porque el cariño de la gente una vez más me va a dejar marcado de por vida”, indicó.
Sin embargo, espera que esta no haya sido la despedida oficial, en virtud de que esperan avanzar a la Liguilla y con ello, tener, al menos, un partido más en casa.
“El recibimiento y la despedida de la gente fue muy emocionante y muy lindo, esperemos que no haya sido la despedida porque quiere decir que entraríamos a la Liguilla y es lo que pretendemos, esperemos que no sea el último partido”, concluyó.
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