Luego de que el viernes pasado Joseph Blatter fuera reelegido por quinta ocasión como presidente de la FIFA, este martes, de manera sorpresiva, anunció su renuncia como mandamás del máximo organismo del balompié.
Después de que la semana anterior detuvieran a siete directivos de la FIFA por el FBI acusados de soborno y corrupción, entre otros delitos relacionados con la organización y sedes de varios campeonatos del mundo, el suizo llamó a una conferencia emergente para dimitir como máximo dirigente, debido a que no se sentía apoyado por el mundo del futbol.
“Aunque fui reelegido, no tenía el apoyo de todo el mundo del futbol. Llamé a un congreso extraordinario. El nuevo presidente será elegido, continuaré ejerciendo como presidente hasta que se conozca al nuevo presidente y se realicen las elecciones. El próximo congreso se realizará en México en mayo del siguiente año y esperamos que para esa fecha ya se ha ya elegido mi sucesor. He reflexionado profundamente sobre mi presidencia y los 40 años en los que mi vida ha estado indisolublemente ligada con FIFA y el gran deporte del fútbol. Amo a FIFA más que cualquier otra cosa y solo quiero hacer lo que sea mejor para la FIFA y el fútbol. Me sentí obligado a presentarme a reelección porque creía que era lo mejor para la organización. La elección ha terminado, pero los retos que enfrenta la FIFA, no “, explicó, en cuanto a sus razones para decirle adiós a su cargo.
Afirmó que se necesita recuperar la tranquilidad en el mundo del futbol: “La FIFA necesita una profunda renovación frente a los desafíos que no se detienen. Necesitamos un cambio estructural de FIFA. Eñ comité ejecutivo debe ser revisado y la forma de elegir a sus miembros también. Es fundamental observar los méritos y los trabajos de los elegidos en FIFA. Espero que esos cambios sucedan. No puedo revisar esos cambios solo”.
“El congreso extraordinario se debe realizar en una fecha anterior (al congreso de México) para elegir a mi sucesor”, apuntó.
“Estoy muy ligado a FIFA y a sus intereses, esos intereses son muy preciados para mí y por ello que he tomado esta decisión. Mi profunda inquietud por la FIFA y por sus intereses, a los que otorgo el mayor valor, me ha llevado a tomar esta decisión. Quiero agradecer a quienes siempre me han apoyado de manera constructiva y leal como presidente de la FIFA y que han hecho tanto por el juego que todos amamos. Lo que más me importa es que, una vez que haya terminado todo esto, el fútbol será el ganador”, comentó Blatter, quien sumaba 17 años al frente del organismo.
Blatter, de 79 años, agregó que “la institución de la FIFA y el futbol alrededor del mundo están por encima de todo”.
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