Años atrás las abuelitas solían decir que con el inicio de la Cuaresma se tenían que evitar muchas cosas en forma de prohibición por vigilia.
Sin embargo, los tiempos han cambiado, y hoy en día llevar a cabo estas abstinencias, en especial a través de las redes sociales, sería casi imposible, señaló la socióloga de la Universidad Autónoma de Nuevo León, Rebeca Moreno Zúñiga.
“Cada vez hay menos prohibiciones, por ejemplo: las alimentarias no necesariamente se llevan a cabo y, en el mismo contexto, dudo que se vaya a dejar de lado la participación en las comunidades virtuales durante los 40 días de la Cuaresma.
“Éste podría ser un sacrifi cio para los jóvenes que van más a la iglesia, pero el resto no lo hace de manera deliberada, sino porque en su traba- jo o la escuela requieren estar conectados”, dijo
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