La Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés) está desarrollando el llamado el Orbitador Solar, una sonda que se acercará al Sol más que ningún otro artefacto espacial y está diseñado para investigar la influencia de nuestra estrella en su entorno.
En la actualidad, la mayor parte de los satélites que estudian el Sol lo hacen a una distancia de unos 149 millones de kilómetros. El orbitador se situará a 42 millones de kilómetros.
Los trabajos de desarrollo de la sonda acaban de empezar. Esperan que esté lista para el su lanzamiento en el año 2017.