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En realidad, se trata de una manera de inculcar a los niños costumbres muy sanas. Y cuanto antes, mejor. Son muchos los que hablan de lo beneficioso de aprender a nadar aun siendo neonato, así que no es de extrañar que haya quien quiera enseñarles algo de yoga desde su más tierna infancia…
Lena Fokina así lo piensa, e inauguró una escuela de yoga para recién nacidos (y sus padres). Entre las prácticas que los padres tienen que llevar a cabo está la de zarandear por los aires al crío, en ocasiones con una sola mano: se trata de un ejercicio para ayudar al desarrollo muscular de la criatura.
Pero, por desgracia para ella, se ha encontrado con la incomprensión de muchos, que han denunciado sus prácticas como sumamente peligrosas después de que el vídeo se convirtiera en un viral en Internet.
Fokina, una rusa de 51 años, lleva un tiempo dando cursillos de unas dos semanas, en los cuales se enseñan diferentes ejercicios para realizar junto al crío, denominados “bebé dinámico”. Se trata de estimular los reflejos naturales del pequeño mientras aún es un lactante, algo que puede ayudar a su desarrollo físico y mental en el futuro.
Durante estos ejercicios, muchos niños lloran y acaban vomitando, aunque ella defiende que “con el tiempo acaban disfrutándolo. Es muy bueno para ellos. He trabajado con padres a lo largo de toda Europa, y en breve trabajaré con una familia inglesa. Creo que hay muchos padres abiertos de mente cuyos bebés se pueden beneficiar de mi trabajo”.
Cuando Fokina comenzó a dar estas clases en Rusia, pronto descubrió que había mucho interés, y ya ha impartido sus cursos en países como Tailandia, la India o los ya mencionados Egipto e Inglaterra, aplicando el “método Charkovsky”. Dicho método tiene más prácticas criticadas por las asociaciones de defensa infantil, como el “renacimiento acuático”, en el que hay que realizar varias aguadillas a los pequeños para liberar “el trauma reprimido por el nacimiento”.
“Desde que nace, un niño puede agarrarse, ponerse en pie, sostenerse por sí mismo y nadar. La cantidad de tiempo que lleva a un adulto entrenar a un niño depende de la sensibilidad del padre. A veces sólo hace falta un entrenamiento”, afirmaba. Folkina conoció esta metodología en la universidad de cultura física de Moscú, y entrenó en este método a sus propios hijos, y acusa de ignorante a la gente que los rechaza: “Mis hijos soncampeones en paracaidismo, caída libre y equitación”, cualidades que, sin duda, se deben a esta práctica.
El propio Dr. Charkovsky, creador de esta escuela de yoga, también está presente en algunos de los seminarios de su alumna. Doctores de todo el mundo han advertido que este tipo de movimientos violentos y poco normales pueden traer hemorragias cerebrales, retinales y el llamado “Síndrome del bebé sacudido”, debido a movimientos de la cabeza bruscos en un cráneo aún formándose.
De momento, ya existe un movimiento que pide la abolición de esta peculiar manera de estimular el desarrollo del infante. Mientras tanto, sus defensores siguen tratando de extender la palabra.