Muchos jóvenes siguen la “moda” de tatuarse la piel de una forma muy agresiva: la denominan “el reto del hielo y la sal” y consiste en mezclar sal con agua congelada, lo que hace bajar su temperatura hasta los 17 grados bajo cero.
Esos cubitos se aplican a la piel, que dejan unas quemaduras más graves que las que produce el hielo no alterado. Este sistema no sólo es un peligro para la salud de la piel, sino también para los huesos y músculos de la zona de la marca, que pueden sufrir daños irreversibles.
Estudiantes de la Universidad de Durham decidieron crear la tendencia del porting, cuyo objetivo es vaciarse una botella de vino de Oporto, para responder a sus pares de Newcastle, quienes inventaron el milking.
De acuerdo a la explicación dada por los jóvenes de Durham, se decidieron por una tendencia basada en el vino porque son intolerantes a la lactosa.
Milking , el objetivo es vaciarse en el cuerpo una botella de leche y brindar, con un poco de lo que queda en el envase.
Planking: Se trataba de acostarse boca abajo en cualquier parte, con los brazos pegados al cuerpo y los pies estirados.
Batmanning : La idea era colgarse y emular la posición de los murciélagos. El nombre proviene del superhéroe Batman.
Owling : El objetivo es emular a los búhos. Aunque más fácil de hacer, la idea era subir hasta lugares altos y mantenerse sin hacer nada.
Reto canela : Además de tonto, peligroso. La posibilidad de ahogarse al comer polvo de canela en 60 segundos, sin tener líquido alguno al alcance, es grande en esta prueba.