Novak Djokovic quiere dejar atrás toda la polémica por negarse a vacunarse contra el covid-19.
“Echo de menos la competición», dijo el astro serbio el domingo, día inaugural del Masters de Montecarlo que pone en marcha la temporada europea en polvo de ladrillo. “Todavía tengo la motivación para estar en la gira … y de medirme con los mejores jugadores del mundo por los títulos más importantes”.
El campeón de 20 grandes apenas ha disputado un torneo en lo que va de 2022, sucumbiendo ante Jiri Vesely en los cuartos de final de Dubái.
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Djokovic no pudo defender su título del Abierto de Australia en enero tras ser deportado del país por no haberse inoculado.
Más recientemente, tuvo que saltarse los torneos de Indian Wells en California y Miami debido que no podía viajar a Estados Unidos por el mismo motivo. Ha advertido que no se vacunará para poder competir.
Para Djokovic, 2022 ha sido un año turbulento, primero con la detención y la saga legal de 11 días en Australia, que acabó con la deportación.
Rafael Nadal se coronó campeón en el Melbourne Park para atrapar su 21er título en un grande, rompiendo el empate que mantenía con Djokovic y Roger Federer en la tabla histórica del tenis masculino.
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A fines de febrero, Djokovic fue desplazado en la cima del ranking por primera vez en dos años. Retrocedió al segundo peldaño, por detrás de Daniil Medvedev, aunque volvió al máximo sitial.
Y el 1 de marzo, Djokovic anunció que Marian Vajda no iba a seguir como su entrenador tras 15 años juntos.
“Los últimos cuatro, cinco meses, han sido muy complicado para mí en la parte mental y empcional, pero aquí sigo y voy a tratar de dejar todo eso atrás y seguir adelante», dijo Djokovic el domingo.
Djokovic debutará en Mónaco el martes
Las autoridades en Francia y Mónaco levantaron casi todas las restricciones por la pandemia el mes pasado, con lo que los individuos no vacunados pueden ingresar al país, además de poder entrar a restaurantes, arenas deportivos y otros lugares.
Con la defensa del título del Abierto de Francia en la mira, Djokovic afirmó que el polvo de ladrillo en Mónaco le ofrece el mejor escenario para volver a la actividad aunque “históricamente no ha sido mi superficie más exitosa”.
“Me tomará algo de tiempo, algunos partidos para entrar en ritmo, para alcanzar el nivel competitivo que necesito”, añadió. “Roland Garros es el objetivo final en la temporada de arcilla”.
El Abierto de Francia arrancará el 22 de mayo en París.