La Selección de Japón es la nueva campeona del Clásico Mundial de Beisbol tras imponerse en la final sobre Estados Unidos (3-2) en el loanDepot Park.
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Los locales fueron los primeros en pegar. En la segunda alta, Trea Turner bateó un jonrón elevado por el jardín izquierdo, con lo que la novena estadounidense se fue al frente en la pizarra.
Sin embargo, los nipones respondieron rápido en la segunda baja. Primero Munetaka Murakami consiguió un cuadrangular solitario, entre el jardín derecho y central, para igualar el marcador.
Y en la misma entrada Lars Nootbaar bateó un rodado de out, pero Kazuma Okamoto —que se encontraba en segunda base— logró la carrera y así los asiáticos consiguieron la voltereta.
En la cuarta baja los japoneses ampliaron su ventaja con otro batazo, ahora de Okamoto, que se voló la barda entre los jardines izquierdo central.
Las siguientes entradas se destacaron por el duelo de pitcheo, ya que lograron evitar más anotaciones. Aunque en la octava alta apareció Kyle Schwarber con un home run, entre los jardines derecho y central, para acercar a los Estados Unidos en la pizarra.
El triunfo de los nipones se concretó en la novena alta, cuando la estrella Shohei Ohtani ponchó a Mike Trout, que significó el tercer out y el fin del partido.
Estados Unidos no pudo revalidar el título que consiguió hace seis años; mientras que Japón ahora puede presumir que es tricampeón del Clásico Mundial de Beisbol, además de que lo consiguió de manera invicta y en la edición que más participantes tuvo, 20 equipos.
