Cruz Azul comienza con la renovación de su plantel bajo las órdenes de Iván Alonso y Martín Anselmi. Luego de que los celestes juntarán todas las piezas en su apartado directivo, los movimientos de la plantilla empiezan a surgir y tras la llegada de Gonzalo Piovi, es Gabriel ‘Toro’ Fernández quien se suma al club como el artillero letal que se buscaba desde la temporada pasada.
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Previo al anuncio oficial de Anselmi como nuevo director técnico, Cruz Azul cierra el fichaje de Fernández, delantero que la temporada anterior tuvo un rendimiento destacado llegando hasta la fase de semifinales con Pumas.
Las negociaciones entre directivas no fueron por un buen camino, ya que los universitarios tenían claro que no buscaban desprenderse del jugador a menos que se pagara su cláusula de recesión, por lo que los cementeros tuvieron que abrir la cartera para hacerse con los servicios del futbolista, que es un pedido especial del estratega argentino.
Es importante mencionar que esta operación resultó ser un negocio redondo para Pumas, que con la intención de concretar la llegada del delantero hace seis meses, dio un pago significativo al Celta de Vigo para destrabar el fichaje y ahora, podrá buscar un remplazo de mayor precio.
Con Pumas, el Toro firmó una buena temporada en la que tuvo 23 juegos diputados, consiguiendo 9 anotaciones y una asistencia.