En mayo de 1994, el deporte motor vivió un escalofriante fin de semana durante el gran Premio de San Marino en el que dos grandes pilotos perdieron la vida y uno más quedó con graves heridas. Ayrton Senna, Rubens Barrichello y Roland Ratzenberger, fueron los protagonistas del sombrío capítulo que vivió la Fórmula 1, mismo que ahora es recordado por los fanáticos a 30 años de haber sucedido.
Fue en el Autódromo Internacional Enzo e Dino Ferrari de Imola, donde los pilotos de la plantilla de la Fórmula 1 se dieron cita para definir una fecha más del campeonato, lamentablemente el evento se transformó en una pesadilla arrancando el viernes con el accidente sufrido por Rubens Barrcihello. A 225 kilómetros por hora, el Jordan-Hart del piloto salió por lo arires de la pista debido a un desnivel en la pista que lo hizo perder el control e impactar contra el muro de contención.
El monoplaza de Barrcihello volcó en dos ocasiones y quedó de lado dejándolo inmóvil. Según se puede observar en el video, las asistencias acudieron a la curva para voltear el auto y atender al conductor, quien tiempo después aseguró que había muero por seis minutos.
Posteriormente, Ratzenberger y Senna fueron quienes sufrieron los estragos del circuito. El primero de ellos fue durante la clasificación, en la curva Villenueve, Roland se estrelló luego de que su alerón delantero se desprendiera e impidiera el giro del monoplaza en la mencionada curva, la muerte fue instantánea.
Finalmente, Ayrton Senna, con un cúmulo de emociones negativas por los lamentables sucesos, se dispuso a competir el 1 de mayo de aquel año. La muerte del brasileño es hasta ahora un hecho lleno de teorías; sin embargo, lo que se sabe es que en la curva Tamburello, en Imola, Senna pudo doblar y terminó chocando contra el muro 300 kilómetros por hora.
Luego del impacto, una de las ruedas terminó golpeando la cabeza del conductor y tras ello, el brazo de suspensión ocasionó fracturas en el cráneo.
Senna es bien recordado por el mundo del deporte motor, en donde se le reconoce debido a sus destacadas actuaciones que escribieron con letras de oro su nombre en la disciplina. Ayrton es el último ganador latinoamericano sumando 41 victorias en Fórmula 1, con récords como es el del México GP, en donde es el único vencedor latinoamericano que ha tenido la carrera en su historia (1989). Otros podios conseguidos en suelo azteca son 1986 (tercer sitio), 1988 (segunda plaza) y 1991 (tercer lugar).
Otra relación que tuvo el brasileño con México es fue nexo con Alfonso Toledano, con quien coincidió en 1981 con el Fórmula Ford 1600 en el equipo Van Diemen.
