El Gran Premio de Miami de la Fórmula 1 presentó una innovación durante el desfile de pilotos, ya que en lugar de usar autos clásicos o de otro ídolo, se presentaron monoplazas hechos de Lego a escala real, lo que generaron gran sorpresa entre los protagonistas y la afición.
Cada escudería de la F1 contó con una réplica de su auto, donde los dos pilotos de cada equipo recurrió el Autódromo Internacional de Miami para saludar a los espectadores.
Los automóviles fue creados con cerca de 400 mil piezas de Lego para así fuera lo más parecido al real, además de que llevaron las decoraciones y patrocinadores correspondientes.
Los coches recorrieron los 5.4 kilómetros del circuito y lograron alcanzar velocidades de hasta 20 kilómetro por hora con sus unidades de potencia eléctrica y usando autentico neumáticos Pirelli.
Los pilotos lucieron muy impresionados y contentos por poder usar estos autos Lego, e incluso algunos intentaron realizar algunos adelantamientos.
“Ha sido el desfile de pilotos más divertido que hemos tenido nunca, una conducción sucia, ha sido muy divertido”, señaló Lewis Hamilton; mientras que Max Verstappen apuntó “Creo que tendrán que barrer la pista, ¡hay algunos restos de LEGO! Fuimos un poco lentos en velocidad punta y fuimos retrocediendo poco a poco, ¡pero creo que es más importante que limpien la pista!”.
La asociación entre Lego y la Fórmula 1 se formalizó en septiembre del año pasado, por lo que los aficionados pueden adquirir alguno de los sets Lego F1 Speed Champions, en la que puede construir su propio monoplaza a escala. Cada auto fue creado por un equipo de 26 diseñadores ingenieros en la fábrica de Lando, República Checa.