La escudería Alpine de Fórmula 1 provocó una tormenta en el paddock con una serie de decisiones que reconfiguran su alineación de pilotos y su estructura interna.
El equipo francés, en busca de un impulso que mejore su desempeño en la pista, optó por un cambio de timón que involucra la llegada del joven talento argentino Franco Colapinto y la salida sorpresiva del director del equipo, Oliver Oakes.
¿Cuándo regresa Franco Colapinto a las pistas de la Fórmula 1?
El movimiento más destacado fue la promoción de del piloto argentino Franco Colapinto al asiento en sustitución de Jack Doohan.
El australiano, de 23 años, mostró destellos de su potencial, pero su desempeño en el inicio de la temporada 2025 no cumplió con las expectativas del equipo; varios incidentes en la pista y una falta de consistencia en los resultados pesaron en la decisión de Alpine, que busca un piloto capaz de sumar puntos de manera regular y consistente.
Colapinto, por su parte, es considerado una de las grandes promesas del automovilismo; a sus 21 años, el piloto argentino demostró su valía en las categorías inferiores, destacando por su velocidad, agresividad y capacidad de adaptación.
Su llegada a Alpine no solo representa una apuesta por el futuro, sino también una inyección de energía y motivación para el equipo; además, se especula que Colapinto cuenta con un importante respaldo financiero de Latinoamérica, lo que podría ser un factor clave en la decisión de Alpine, en un contexto donde los recursos económicos son fundamentales para el desarrollo y la competitividad en la Fórmula 1.
La salida de Oliver Oakes, quien asumió el cargo de director del equipo Alpine el año pasado, añade aún más incertidumbre al panorama de la escudería; aunque Alpine emitió un comunicado agradeciendo a Oakes por su contribución, los rumores apuntan a que su dimisión está directamente relacionada con la decisión de reemplazar a Doohan, una medida que el director del equipo no habría apoyado.
Esta discrepancia en la visión sobre la estrategia deportiva del equipo provocó una ruptura irreparable que dejó a Alpine sin su líder a pocas carreras del inicio de la temporada europea.
