Una noche de muchas emociones fue la que se vivió en el Estadio Universitario, mismo que robó reflectores al albergar la gran final de la Copa de Campeones de la Concacaf Femenil. A este duelo, Tigres llegó con el sueño de sumar una corona internacional a su vitrina; sin embargo, un cierre agónico le terminó por dar la victoria a Gotham FC.
Es importante mencionar que este partido estuvo lleno de grandes emociones, en primera instancia por la verticalidad que mostró el cuadro local creando importantes llegadas y en segundo plano por la respuesta aventurada que daba el equipo de visitante.
Asimismo, debemos señalar la importancia de las arqueras en los marcos, convirtiéndose en factor rápidamente durante el partido. Esto último fue algo en lo que destacó Itzel González, arquera de Tigres que detuvo dos penales.
El primero de ellos previo a que se terminará la primera mitad. Un tiro contundente que fue contenido con el lance hacia su costado derecho, incluso corriendo con la fortuna de que el palo rechazara la bola que amenazaba con las aspiraciones de Tigres.
En la segunda mitad, la historia se repitió, pero en esta ocasión terminando con la suerte del cuadro mexicano, puesto que la poca contundencia al frente se sumo con la pena máxima que fue cobrada por Esther González.
El disparo de la estrella de Gotham FC al 82′, fue nuevamente atajado por la arquera felina, pero en esta ocasión dando el rebote al centro en donde González reapareció para rematar y mandar la bola al fondo de la red.
Con este resultado, el equipo mexicano dejó escapar la oportunidad de hacer historia internacional y coronarse además en el volcán.