Después de meses de proceso judicial y diplomático, la justicia puso fin a la fuga del exfutbolista neerlandés cuya prometedora carrera se vio truncada por su implicación en el crimen organizado.
Quincy Promes, fue finalmente extraditado desde Emiratos Árabes Unidos a los Países Bajos para enfrentar las condenas impuestas por su implicación en la importación de cocaína.

La entrega del exdelantero de clubes como el Ajax y el Spartak de Moscú se concretó recientemente, poniendo fin a su estancia en Dubái, donde había sido detenido a principios de 2024; su arresto en el país árabe se produjo mientras el futbolista se encontraba de vacaciones, poco después de que la justicia neerlandesa emitiera una condena en su contra.
Quincy Promes, de 32 años, fue condenado a seis años de prisión por su papel en la importación de mil 360 kilogramos de cocaína en 2020.
Los tribunales neerlandeses determinaron que Promes, junto con un cómplice, estuvo involucrado en el tráfico de la droga a través del puerto de Amberes; esta sentencia se sumó a una condena previa de 18 meses de prisión impuesta en junio de 2023 por apuñalar a su primo en 2020, un incidente que ya había puesto su carrera en jaque.

Tras la condena por narcotráfico, se emitió una orden de arresto internacional, lo que llevó a su detención en Dubái, donde se había establecido en los últimos tiempos; el proceso de extradición, a menudo complejo y prolongado entre naciones, finalmente llegó a buen puerto, permitiendo que Promes fuera trasladado a su país natal para cumplir con las sentencias dictadas en su contra.
La llegada de Promes a Países Bajos significa que el exfutbolista será inmediatamente puesto a disposición de las autoridades judiciales para comenzar a cumplir sus condenas. El caso de Quincy Promes ha sido un triste ejemplo de cómo una carrera deportiva brillante puede desmoronarse debido a implicaciones en actividades criminales.