El futbol mexicano se cimbró luego de que Grupo Orlegi anunció oficialmente este 15 de julio que inició el proceso para la venta de Atlas de Guadalajara, después de seis años de operaciones.
Ahora, se convierte en el segundo conglomerado de la Liga MX que pone fin a la multipropiedad, tras la venta del Club Querétaro a Innovatio Capital, de Marc Spiegel, por parte de Grupo Caliente.
¿Fin de multipropiedad es el fin del ascenso?
Pese a que esta noticia genera cierto grado de positivismo debido a que representaría un paso hacia adelante en el progreso del balompié azteca, puede no ser así.
De hecho, esto podría significar todo lo contrario, ya que hace poco, un fondo de inversión estadounidense de más de mil millones de dólares estuvo cerca de llegar a la Liga MX.
Aunque pudo dejar ganancias estratosféricas para los dueños de los 18 clubes no se concretó porque uno de los requisitos era ponerle fin a la multipropiedad.

Meses después de que se reveló la noticia, Querétaro ya se vendió y Atlas se encuentra en el proceso. Mientras tanto, Grupo Salinas y Grupo Pachuca, que cuentan con dos equipos cada uno, también ya iniciaron gestiones para vender a Puebla y León, respectivamente.
Esto da apertura para que el Fondo de Inversión de Apollo Global Management se lleve a cabo y, tras el fin de la multipropiedad, el siguiente paso sería erradicar por completo el ascenso y descenso.
Lo anterior porque dicha firma estadounidense exige que, para inyectar capital en la Liga MX, tiene que haber un grupo cerrado de clubes, ya que para garantizar un retorno en su inversión, busca obtener un porcentaje de los ingresos de los equipos, que en este caso serían venta de boletos, derechos de transmisión y hasta patrocinios.
Por ahora se desconocen más detalles sobre si pronto se retomarán las pláticas con Apollo para llevar a cabo este proyecto una vez que se erradique por completo la multipropiedad, pero poco a poco este rumor comienza a tomar fuerza, principalmente porque la mayoría de los dueños se opone al regreso del ascenso y descenso y también apoyan el Fondo de Inversión.
Todo esto, mientras varias instituciones de la Liga de Expansión mantienen una demanda ante el TAS para el regreso de este formato de competencia, por lo que el futbol mexicano podría vivir pronto un nuevo episodio de polémica.