Cadillac, bajo General Motors y Andretti, busca establecerse en la F1 en 2026, para este nuevo equipo, la experiencia y el desarrollo son cruciales.
Sergio Pérez, con su trayectoria y popularidad, parecía el candidato ideal para liderar el proyecto; sin embargo, reportes recientes sugieren que su llegada se ha complicado.

La principal razón radica en la inevitable curva de aprendizaje de un equipo debutante, Cadillac, al ser una escudería completamente nueva, no ofrecerá victorias inmediatas, un escenario que podría no alinearse con las aspiraciones de Pérez de luchar por la cima.
La escudería estaría priorizando el “compromiso y la personalidad” de sus pilotos para la fase de desarrollo, y la postura de Pérez de mantener abiertas otras opciones podría haber influido en la decisión.
El nuevo favorito de Cadillac
En este escenario de incertidumbre para Pérez, Valtteri Bottas emergió con fuerza; el finlandés, con vasta experiencia en F1 y una reputación como desarrollador de monoplazas, posee un perfil muy atractivo para Cadillac.
Su profundo conocimiento técnico y capacidad para guiar un proyecto desde sus cimientos son cualidades invaluables.

Reportes desde el paddock, incluso desde Spa-Francorchamps, indican que Cadillac finalizó su alineación con Bottas como uno de los elegidos, faltando solo el anuncio formal.
La escudería se habría decantado por él debido a su “compromiso y personalidad”, considerándolo un pilar fundamental para el proyecto a largo plazo.
El futuro incierto de Checo en la F1
La aparente preferencia de Cadillac por Bottas es un golpe significativo para las aspiraciones de Sergio Pérez; ya que Sus opciones se reducen, con Alpine como la principal alternativa rumoreada.
El mercado de pilotos se cierra rápidamente, y cada día sin un contrato confirmado aumenta la presión sobre el piloto mexicano, el futuro de Checo Pérez en la Fórmula 1 pende de un hilo, mientras la afición espera ansiosa la definición de su próximo capítulo.