La Velada del Año 5 de Ibai Llanos no solo fue un espectáculo de proporciones épicas que rompió récords de audiencia, sino que también se convirtió en un parteaguas financiero para sus protagonistas.
Entre todas las figuras que se subieron al ring, el nombre de Alana Flores, la carismática streamer mexicana, resuena con un eco particular, no solo por su contundente victoria, sino por la impresionante cantidad de dinero que ingresó a su cuenta bancaria, consolidándola como una de las figuras más rentables del panorama digital y deportivo.

Aunque las cifras oficiales nunca son reveladas por la organización, diversas fuentes cercanas a la producción y análisis de expertos en la industria de eventos y creadores de contenido estiman que Alana Flores habría ganado una cantidad que oscila entre los 40 mil dólares por su participación y victoria.
Esta cifra, que al tipo de cambio actual supera los 800 mil pesos mexicanos, la coloca en un nivel de ingresos equiparable al de figuras televisivas de primer orden.
La compensación de los participantes en la Velada del Año es un híbrido que combina un pago base por la participación, que aumenta significativamente con la victoria, y una porción variable que depende en gran medida del impacto mediático y la generación de contenido que cada figura aporta antes, durante y después del evento.
En el caso de Alana, su preparación meticulosa, su interacción constante con sus seguidores, la creación de narrativas previas al combate y la visibilidad que obtuvo al ser una de las pocas representantes latinas, dispararon su valor.
Su victoria no solo fue celebrada por sus seguidores, sino también por marcas y patrocinadores que ven en ella un potencial imparable en el mundo del streaming y el entretenimiento deportivo.

Con este triunfo, Alana Flores consolida su carrera no solo como creadora de contenido, sino también como atleta de alto impacto. Su actuación fue una de las más comentadas en redes sociales, convirtiéndose en tendencia en México, España y Latinoamérica durante varias horas.
El fenómeno de La Velada sigue creciendo, y con estrellas como Alana, el futuro del boxeo de creadores luce más brillante y rentable que nunca.