En el siempre electrizante escenario del US Open, Carlos Alcaraz volvió a demostrar que no solo es uno de los mejores tenistas del mundo, sino también uno de los más creativos.
Durante su enfrentamiento de octavos de final contra Arthur Rinderknech, el joven español dejó a todos sin aliento al ejecutar un golpe que rozó la fantasía y que rápidamente se convirtió en uno de los momentos más virales del torneo.
El instante mágico llegó en el cuarto juego del primer set, tras un intercambio rápido cerca de la red, Alcaraz se vio obligado a improvisar para responder un potente tiro de su rival.
Sin tiempo para girar la raqueta o posicionarse, decidió hacer lo impensable: conectar la pelota con un toque por detrás de la espalda, perfectamente dirigido, que no solo cruzó la red, sino que dejó inmóvil a Rinderknech y desató la ovación más sonora de la jornada en el Arthur Ashe Stadium.
Más allá de la espectacularidad del punto, Alcaraz mantuvo la compostura y dominó el resto del partido con autoridad. Se impuso con parciales de 7-6(3), 6-3 y 6-4, asegurando su pase a los cuartos de final y confirmando que está decidido a pelear por el título.
El triunfo también tuvo un valor histórico: el murciano alcanzó su decimotercer cuarto de final en torneos de Grand Slam antes de cumplir 23 años, igualando las marcas de leyendas como Björn Borg y Boris Becker.
Además, es la primera vez que logra avanzar a esta ronda en los cuatro majors en una misma temporada, consolidándose como uno de los grandes referentes del tenis actual.
Con talento, audacia y una pizca de magia, Carlos Alcaraz continúa escribiendo su historia en las canchas más importantes del mundo.
En la rama femenina, la estadounidense Jessica Pegula no tuvo problemas para avanzar a la siguiente ronda, derrotando a su compatriota Li con un contundente 6-1 y 6-2 en un partido que demostró su dominio y consistencia.