Un duelo llamativo y accidentado es el que se está llevando jugando en el Estadio Hidalgo, donde Pachuca y Cruz Azul buscan los tres puntos de la jornada 8, pero en su intención han dejado escenas que han paralizado al público. Desde el inicio del partido las dudas sobre el arbitraje se hicieron presentes, pero estas no se materializaron hasta que tres expulsiones se dieron.
En la primera parte, una roja se hizo presente afectando al cuadro de la Máquina tras una barrida imprudente de Chiquete Orozco, sobre Cádiz. En este escenario, si bien la roja no fue discutida, los azules se sintieron afectados al no amonestar al jugador de Pachuca, quien también dejó un pisotón sobre el defensor.
Con esta situación el juego se fue a medio tiempo y para la parte complementaria las malas decisiones del arbitraje afectaron a los tuzos. Nuevamente en la primera decisión una determinación acertada se dio para dejar fuera del partido a Quiñones por un planchazo sobre Rotondi, pero la polémica fue en la última tarjeta roja.
Nacho Rivero recibe escandalosa falta que cambia el partido
El momento clave fue al 66′, cuando un tiro de esquina por derecha cayó al corazón del área, en donde Aceves expulsó con la pierna derecha. En esta acción, Rivero intenta ganar con un remate de cabeza, pero al llegar a destiempo se estrella con los tachones del defensor.
Esto hizo que la sangre brotara de su cabeza, provocando la revisión de la acción y la posterior expulsión que dio pie al penal. Como era de esperarse, esto fue criticado por los aficionados por el mal trabajo del árbitro que definió el partido.
Mencionar que el penal fue marcado por Gabriel Fernández, otorgando la victoria 1-0 de los celestes sobre los tuzos, misma que los mantiene invictos en el torneo.