Una vez más, la pasión del balón hizo vibrar a México. En esta ocasión fue la participación de la Selección Nacional Femenil en el Mundial Sub-17 la que robó reflectores y se llevó los aplausos tras concretar el tercer lugar del campeonato en un agónico partido ante Brasil que se definió desde los once pasos.
El camino del Tricolor en Marruecos fue de menos a más, iniciando con un descalabro ante Corea del Norte, pero luego un repunte en fase de grupos con Países Bajos y Camerún. Este buen rendimiento las dejó avanzar y sorprender con su calidad a Paraguay en octavos e Italia en cuartos.
Lamentablemente, en la semifinal ante Países Bajos la suerte no estuvo de su lado y un solitario gol en contra tras una falla en defensa sentenció su búsqueda del campeonato. Es así como México se situó en el duelo por el tercer lugar de la competencia.
Frente a las juveniles, un fuerte cuadro de Brasil se plantó con la intención de robar a las aztecas su lugar en el podio; sin embargo, la resistencia nacional fue más fuerte y en la última instancia aseguraron el puesto de bronce en el Mundial Sub-17 Femenil, lo que sería una de sus mejores participaciones de la justa.
¿Cómo se desarrolló el partido?
En un juego plagado de emociones, las múltiples llegadas pusieron al filo del asiento a los aficionados, pero ninguna se concretó hasta la recta final del juego.
Kaylane Vieira, al 79′, consiguió el primer gol del partido y cuando ponía a todo su país a soñar con el tercer puesto, México empató con un autogol de Evelin al 90′.
Con este resultado los penales fueron inminentes y al final, una grandísima actuación de Valentina Murrieta consiguió el 3-1 a favor de México desatando la emoción en el país.