Los representantes de los tres países anfitriones de la Copa Mundial de la FIFA 2026 (Canadá, México y Estados Unidos) estarán presentes en Washington D. C. con motivo del sorteo final de la competición, que se celebrará el 5 de diciembre en el Centro John F. Kennedy.
Han confirmado su asistencia el primer ministro de Canadá, Mark Carney —quien ejerce como jefe de gobierno, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y el presidente de Estados Unidos, Donald J. Trump. Tras el sorteo se conocerá la composición de los doce grupos de cuatro equipos de la primera Copa Mundial de la FIFA con 48 selecciones, un formato que marcará un antes y un después en la historia del fútbol.
Las máximas autoridades políticas recibirán y darán la bienvenida a los miles de millones de aficionados que acudirán a las 16 ciudades anfitrionas entre el 11 de junio y el 19 de julio del próximo año.
México albergará trece encuentros, incluido el partido inaugural, que se disputará el jueves 11 de junio en el Estadio Ciudad de México. Será la tercera vez que el país organice la Copa Mundial de la FIFA, todo un récord histórico. Canadá también acogerá trece partidos —el primero de ellos el viernes 12 de junio en el Estadio Toronto— y, aunque fue sede de la Copa Mundial Femenina de la FIFA en 2015, nunca ha organizado la máxima competición masculina. Estados Unidos celebrará 78 encuentros, convirtiendo a esta edición en la más extensa de la historia, 32 años después de la Copa Mundial de la FIFA 1994. El primer partido en territorio estadounidense se jugará el viernes 12 de junio en el Estadio Los Ángeles, y la gran final será el domingo 19 de julio en Nueva York / Nueva Jersey.
Aficionados de todos los rincones del planeta acudirán a Norteamérica para disfrutar del mejor fútbol del mundo, en una edición para la que ya se han vendido casi dos millones de boletos, de los seis millones disponibles.
La visita de Sheinbaum a Estados Unidos
Tras conocerse la confirmación de la jefa del Estado mexicano, en el país se ha llegado a señalar que este viaje de Sheinbaum se perfila para tener un peso político que va más allá del futbol.
Analistas señalan que la presidenta mexicana podría aprovechar el viaje para reafirmar el compromiso de México con el T-MEC y responder a las recientes amenazas de aranceles desde Washington, especialmente en sectores como acero, autopartes y agricultura. Canadá, por su parte, ha mostrado preocupación respecto a las disposiciones sobre comercio digital y estándares ambientales de cara a la revisión del próximo año.
Trump ha reiterado que quiere “un mejor acuerdo” con México y Canadá, lo que ha encendido alertas entre grupos empresariales ante la posibilidad de que una nueva ronda de incertidumbre comercial afecte las cadenas de suministro justo cuando las economías norteamericanas muestran signos de desaceleración. Mark Carney, quien asumió como primer ministro canadiense este año, ha insistido en la importancia de la “estabilidad y previsibilidad” en el comercio trilateral sin embargo, recientemente dijo que las relaciones comerciales históricas con su vecino del sur habían llegado a su fin.
Aunque Claudia Sheinbaum no ha precisado si se reunirá por separado o de manera conjunta con Trump y Carney, ni si se emitirá algún comunicado oficial después de los encuentros, funcionarios mexicanos han minimizado la posibilidad de una negociación formal durante este viaje y han calificado la visita como una oportunidad para “mantener abiertas las puertas” días antes de que el foco mediático del Mundial recaiga sobre Norteamérica.
Tensión entre Estados Unidos y Canadá
Este evento mundialista llega en un momento en el que el presidente Donald Trump dejó entrever que podría salir por completo del T-MEC.De confirmarse, sería un golpe crítico para Canadá, con riesgos inmediatos para más de 400 mil empleos y la posibilidad de una recesión severa en el corto plazo.
Hay señales fuertes de que el movimiento va en serio y, por tanto, no solo Canadá tendría que revisar su relación con Estados Unidos. Es por ello que Canadá está viendo en Europa como un flotador para su economía.