Red Bull se encuentra envuelto en la polémica, ya que a pocos días de que Max Verstappen perdió el campeonato del mundo, Helmut Marko, quien recientemente fue despedido de la escudería, dio una contundente declaración sobre Christian Horner que cimbró a toda la Fórmula 1.
El histórico asesor del equipo austriaco rompió el silencio y reveló presuntas prácticas internas que, según él, dañaron tanto al equipo como a algunos de sus pilotos, entre ellos Sergio “Checo” Pérez.
Acusa a Horner de boicotear al equipo
El contexto de esta situación se remonta a las tensiones internas que Red Bull ha vivido en los últimos años, especialmente tras la muerte de Dietrich Mateschitz, cofundador de la marca.
Desde entonces, diversas versiones apuntan a una lucha de poder dentro de la escudería, en la que Christian Horner fue ganando influencia, mientras que figuras clave como Helmut Marko perdían peso en las decisiones deportivas. Estas fricciones, de acuerdo con Marko, terminaron afectando el ambiente interno y el rendimiento general del equipo.
Jugó sucio contra Checo
En sus recientes declaraciones, Marko aseguró que el entorno de Horner “jugó sucio” y fue responsable de fabricar o manipular declaraciones que se le atribuyeron a él sobre Checo Pérez. Dichos comentarios, que en su momento fueron catalogados como ofensivos o discriminatorios, generaron una fuerte polémica mediática y colocaron al piloto mexicano en el centro de la crítica. Marko negó tajantemente haber hecho esas afirmaciones y sostuvo que fueron utilizadas para desacreditarlo y debilitar su posición dentro de Red Bull.
“Esos últimos años con Horner no fueron agradables. Se jugaba sucio. ¿Te acuerdas de los tiempos de Sergio Pérez, cuando se decía que los mexicanos están menos centrados que los holandeses o los alemanes? Eso fue fabricado, tal vez por ellos", dijo en entrevista con El Limburger.
“Igual que hubiera difundido en 2024 que el desarrollo de nuestro motor estaba atrasado y que por eso perderíamos a Ford como patrocinador. Nunca dije eso, pero Horner quiso utilizarlo para suspenderme. Como Max entró en la brecha en Jeddah, no ocurrió”, añadió.
Este señalamiento no solo reavivó el debate sobre el trato que recibió Checo Pérez durante su etapa con el equipo, sino que también expuso las profundas divisiones internas que, según muchos analistas, contribuyeron al declive de Red Bull en la temporada y a la pérdida del campeonato por parte de Verstappen. La Fórmula 1 vuelve así a encenderse fuera de la pista, con un escándalo que deja en entredicho la gestión de una de las escuderías más dominantes de la última década.

