El ambiente que envolvió a este esperado juego tuvo un sabor agridulce para los aficionados de la NFL, ya que si bien la rivalidad entre los Dallas Cowboys y los Washington Commanders es una de las más históricas, el choque llegó en un momento de poca relevancia clasificatoria. Ambos equipos arribaron al encuentro ya eliminados de la contienda por la postemporada, lo que transformó el partido en una batalla por el honor divisional y el cierre digno de una campaña complicada.
Los Cowboys (7-8-1) buscaban romper una racha de tres derrotas consecutivas, mientras que los Commanders (4-12) intentaban frenar una caída libre que los ha llevado a perder diez de sus últimos once compromisos
El partido comenzó con una exhibición de eficiencia por parte de la ofensiva de Dallas. Dak Prescott y compañía anotaron en sus primeras tres posesiones, tomando una ventaja tempranera de 21-3 que parecía sentenciar el encuentro desde el inicio. Mencionar que la primera anotación llegó tras una serie de 78 yardas que culminó con un pase de Prescott para Jake Ferguson; poco después, un acarreo de 4 yardas de Javonte Williams amplió la distancia a 14-3.
El momento más espectacular de la tarde ocurrió cuando, a pesar de estar encajonados en su propia yarda 3, Prescott conectó un bombazo de 86 yardas con KaVontae Turpin, quien escapó hasta la zona de anotación para poner el marcador 21-3.
Previo al descanso, los de la capital intentaron acercarse con una anotación que puso la pizarra 24-10. En la segunda mitad, los Commanders mostraron señales de vida gracias a Jacory Croskey-Merritt, quien se convirtió en el motor del equipo al escaparse para un touchdown de 72 yardas en el tercer cuarto, poniendo el juego 24-17 y encendiendo a la grada.
En contraste, los de la estrella solitaria frenaron las aspiraciones de sus rivales con la precisión del pateador Brandon Aubrey. La calidad de este fue necesaria para marcar desde 42, 52 y 51 yardas para mantener la ventaja necesaria. Si bien Washington se acercó a una sola posesión sobre el final, el tiempo no fue suficiente para concretar la remontada, sellando el triunfo de Dallas por 30-23.
Referente a los números vistos en el juego podemos destacar los de Dak Prescott, quien finalizó con 307 yardas, ninguna intercepción y dos pases de anotación, alcanzando los 30 en la temporada, empatando el récord de la franquicia de Tony Romo con cuatro campañas de al menos 30 envíos de anotación.
Por el lado de Washington, Josh Johnson cumplió con una labor discreta pero sólida, completando 15 de 23 pases para 198 yardas. A él se sumó la figura solitaria de Croskey-Merritt, quien acumuló 105 yardas terrestres y dos anotaciones.
A pesar de que la victoria no les otorga un lugar en los playoffs, el triunfo tiene un peso simbólico importante para la organización de Jerry Jones. Con este resultado, los Dallas Cowboys barrieron la serie anual ante los Washington Commanders en la temporada 2025-26, llevándose ambos enfrentamientos divisionales.
Este éxito navideño permite a Dallas recuperar la confianza en su esquema ofensivo y reafirmar su dominio histórico sobre los de la capital, dejando a Washington sumido en la incertidumbre de cara a la próxima campaña.