Aunque en la vida real, Gabriel Soto e Irina Baeva están a un paso de llegar al altar y se profesan su romanticismo, en la trama de la telenovela “Amor dividido” viven una gran crisis como pareja. “Max” y Debra” están a punto de separarse y en el segundo capítulo del melodrama dejan en evidencia las grietas de esta relación.
“Cambio mi vuelo para mañana”, dice el personaje de Soto preparándose para la separación inminente. Ella le clama por su compañía y tomándolo de las manos le pide cambiar de opinión. “Max, no sabes lo que te necesito, no te imaginas cómo me siento”.
El protagonista parece estar determinado a poner distancia y le reclama a su esposa por su comportamiento frívolo e indiferente. “¿A tí te importa lo que yo no necesito? ¿A tí te importa cómo me siento? Me mentiste Debra y sabes perfectamente que lo que más odio en esta vida es la mentira”, le reclamó por su decisión de terminar con su embarazo y poner su trabajo como prioridad.
“Tu sabes que no era el momento de ser padres. Tu te vas a ir a México y yo me voy a quedar aquí sola. De verdad esto fue lo mejor, aunque nos duela a los dos”. Pero él sigue el reclamo y le contesta: “Tal vez lo mejor para tí pero no para mí. Tu sabes lo mucho que deseaba tener un hijo, formar una familia, y me mentiste, ni siquiera sé si voy a volver a confiar en tí”.
En el capítulo primero, Debra se enteró de su embarazo y ante la confirmación de la espera, le expresó a su madre. “Lo sospechaba pero esperaba estar equivocada. Siento que todavía no es el momento de tener un bebé, tengo miedo, no me siento preparada. Este es el peor momento, Max está super concentrado en su trabajo y yo estoy a punto de lanzar mi marca, no quisiera posponer mis planes para tener que cambiar pañales”.
Debra decide someterse a una cirugía para perder el bebé y Max queda destrozado al conocer la verdad. “Me mintió, he perdido a mi bebé”, dijo entre lágrimas al llegar al hospital tras una llamada inesperada. La escena ha sido de las más dramáticas en los primeros episodios de “Amor dividido”.
El público reaccionó en las redes sociales a la escena tan dramática. “Impactada con el primer capítulo, bravísimo”, y “Debra no merece a Max” con emojis de lágrimas, fueron algunos de los comentarios. Otros criticaron la actuación de Soto diciendo que el verdadero protagonista debió ser Andrés Palacios. “¡Que flojera otra vez Gabriel Soto!” y “¡Horrible actuación!”, escribieron.
Fuera de las cámaras, Soto y Baeva se profesan amor verdadero y ya parecen estar listos para darse el sí en el altar, tras comprometerse a finales de 2019. La pareja espera reunir a los familiares de Irina provenientes de Rusia en una ceremonia íntima pero muy elegante en México donde ambos están radicados. La fecha sigue siendo un misterio pero adelantaron que solo esperan terminar las grabaciones de la telenovela para enfocarse en la esperada ceremonia.