Netflix sigue apostando por más contenido de diferentes géneros para su plataforma, desde conceptos originales hasta secuelas de grandes producciones como una nueva entrega de “La Masacre de Texas”. Y si bien el destino de los personajes estuvo en peligro dentro del filme, los actores y el equipo de producción también tuvieron algunos riesgos debido a las delicadas condiciones en las que se filmaron algunas escenas.
La nueva película de Netflix es una secuela directa del clásico slasher original de Tobe Hooper de 1974. Está ambientada casi 50 años después de que Sally escapara de Leatherface y su familia. Ahora se esconde en Harlow, Texas, aunque un nuevo grupo de adultos jóvenes está a punto de entrar en su territorio. Y como resultado, otra masacre está a punto de comenzar.
El peligroso entorno en el que se filmó La Masacre de Texas
A través de una entrevista reseñada en el portal The Hollywood Reporter, el director de La Masacre de Texas, David Blue García, habló sobre varias de las escenas de la nueva entrega.
Como era de esperarse, hizo hincapié en la sangrienta secuencia del autobús que tenía a los usuarios de las redes sociales debatiendo sobre la gran cantidad de sangre y violencia en la pantalla. Sin embargo, agregó que no fue tan fácil para el equipo lograr esa toma.
“Fue una patada en el trasero, pero fue muy divertido”, dijo García. “Filmamos la escena del autobús durante tres o cuatro días diferentes durante la producción, y fue muy difícil hacerlo en medio de la pandemia. Teníamos muchas reglas porque era un espacio muy estrecho con mucha gente. A veces teníamos que limpiar el set para que pudieran entrar y ventilarlo y esterilizarlo por razones de seguridad”.
El director también dejó saber que no solo los riesgos generales de la pandemia hacía del set un lugar peligroso sino también un pequeño detalle de la escena: la gran cantidad de sangre en el escenario. “Estábamos usando mucha sangre allí, así que cuando llegábamos a las cosas de sangre teníamos una toma, pero había un equipo de chicos escondidos en toda la escena rociando sangre por todas partes”, comentó el cineasta.
“Al final de esas tomas, el piso estaría cubierto de sangre y sería demasiado peligroso filmar de nuevo si es demasiado resbaladizo, así que tuvimos que limpiar el autobús y limpiar toda la sangre para que pudiéramos reiniciar y hacerlo de nuevo. Creo que al final valió la pena”, concluyó el director del filme.
¿Cuáles son las opiniones de la película?
De acuerdo con el portal Cheat Sheet, los críticos y el público han evaluado de manera negativa La Masacre de Texas por su falta de razonamiento y porque no hay tanto apego con el filme original de 1974. Sin embargo, a otros críticos les encantó la dirección violenta y sin tapujos de la película que no teme empapar cada centímetro de la pantalla en rojo.
Y es precisamente este detalle sangriento lo que puede llevar al filme a tener otra oportunidad dentro de la plataforma ya que diversas producciones exitosas como The Boys y El Juego del Calamar, e incluso la saga de Saw, han tomado este elemento y lo han llevado a un nuevo nivel que les ha resultado muy bien.
Y si la película resulta un éxito para Netflix, es posible que otra secuela siga sus pasos. La producción establece un relevo en una forma que recuerda al renacimiento de “Halloween” de David Gordon Green. Y con la escena post-créditos que se asomó, García ciertamente dejó la puerta abierta para muchas más locuras de parte de Leatherface en el futuro.
Te recomendamos en video: