La gran fortuna de Kim Kardashian le permitió adquirir un jet privado, tasado en 150 millones de dólares, al que nombró como el “Kim Air” y en el que estableció duras normas para su abordaje.
Durante un reciente episodio del reality, The Kardashians, la integrante del ‘clan Kardashians’ le advirtió a su hermana, Kendall Jenner, las condiciones que debe tener presente para abordar su avión, para viajar a Milán y asistir a un desfile de Prada.
“¿Has visto los asientos de cachemira? No puedes broncearte en aerosol en mis asientos de cachemira”, dijo.
En otros episodios, la empresaria le pidió a los asistentes no tener zapatos dentro del avión, y en reemplazo utilizar “zapatillas Skims personalizadas”.
“No respires. No toques nada”, dijo en tono de broma, pero demostrando el gran cuidado que tiene sobre su avión.
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Avión personalizado al estilo ‘Kardashians’
La hija de North West realizó un gran esfuerzo para personalizar su aeronave, de la mano de dos diseñadores, incluidos Tommy Clements y Waldo Fernández.
Tommy es dueño de Clements Designs, una compañía con sede en Los Ángeles conocida por su “glamour fácil y gran intimidad” en el diseño de interiores. Fernández también tiene su sede en Los Ángeles y posee Waldo’s Designs. Ha trabajado con muchos nombres de alto perfil, como Brad Pitt, Will Smith y Elizabeth Taylor, señala SixPage
La nave es el G650ER, al igual que uno de los que tiene el magnate Jeff Bezos, y se caracteriza por tener una capacidad para 18 personas y, tanto la decoración de los asientos como la de todo el interior, destaca por su fino color crema. Cuenta con un dormitorio trasero con dos camas y dos baños de lujo.
