La presentadora es actualmente una de las celebridades más famosas de la televisión mexicana. Gracias a su carisma, su personalidad extrovertida y su buena onda se ganó el cariño del público, y también tiene encantos físicos que son muy halagados a través de las redes sociales, hablamos de Galilea Montijo quien estuvo en el programa ´Netas Divinas’ y salieron a la luz varias experiencias vividas por ella.
Este espacio sirvió para que la talentosa animadora y actriz, contara detalles de sus experiencias profesionales e íntimas. Allí confesó que tuvo un fuerte problema relacionado con un trastorno mental.
El posparto marcó su vida
En este espacio Montijo expresó que su vida de madre no ha sido nada fácil y sufrió mucho durante el posparto. Añadió que muchas veces la felicidad depende de un medicamento.
“Yo sin el medicamento me hubiera muerto en algún momento. Sí, cuando me dio depresión post-parto tardé un ratito en regresar y, cuando tomé el antidepresivo volví a ver la vida de colores, miré otra vez todo de colores”. Expresó Galilea.
Es común hoy en día tratar el tema de la salud mental y la mexicana compartió que definitivamente la realidad que vivía fue preocupante ya que entró en un proceso de cambios y solamente con una orientación médica lo pudo superar.
Finalmente, Galilea Montijo comentó cómo fue su primer día luego de que comenzó tratamiento: “El primer día que tomé la pastilla, ese momento comencé a ver colores, así lo he platicado siempre. A mí el antidepresivo me ha cambiado por completo todo, por supuesto, unas cápsulas para dormir, que son naturales, también”.
El estrés no la dejaba perder peso
La presentadora de televisión también informó que el estrés no le permitía perder peso y después de haber tenido a su hijo Mateo, aumentó 30 kilos. La solución fue llegar a la orientación médica con una especialista es cirugía bariátrica.