En los años 90′s, llegó a los cines la película ‘Titanic’, la cual fue protagonizada por Leonardo DiCaprio y Kate Winslet en los papeles de Jack Dawson y Rose De Witt Bukater, respectivamente. Esta obra cinematográfica que estuvo bajo la dirección y el guion del cineasta canadiense James Cameron, logró recaudar 1800 millones de dólares en todo el mundo, convirtiéndose así en la película más exitosa a nivel mundial durante más de una década, hasta que fue superada por ‘Avatar’, también dirigida por James, la cual recaudó más de 2700 millones de dólares.
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A 25 años de su estreno, se lanzó una versión en formato 4K Ultra HD de esta aclamada película, que incluye una serie de contenidos adicionales titulados ‘Titanic: Stories from the Heart’. En estos materiales extras, su director revela un error en una de las escenas más emblemáticas.
Se trata de la icónica parte en la que Jack y Rose están en la proa del Titanic. En este momento, el personaje de DiCaprio le pide al de Winslet que cierre los ojos, extienda los brazos y luego los abra, es ahí cuando dice: “Estoy volando”.
Esta escena romántica de la película fue filmada con un escenario real de fondo, capturando dos tomas antes de que el sol se ocultara en el horizonte. “El primero está completamente desenfocado, el segundo está desenfocado durante unos cuatro segundos y luego no, y ese es el que está en la película”.
Por otro lado, en los contenidos adicionales titulados ‘Titanic: Stories from the Heart’, la actriz británica Kate Winslet comparte sus vivencias durante la filmación de esta escena. “Lo hicimos con una puesta de sol de verdad, fue divertidísimo porque Jim decía: ‘la puesta de sol es increíble, ¡vamos, vamos, vamos!’ Y nosotros decíamos: ‘¿qué?’’'.
Según lo mencionado por la actriz, disponían de unos pocos minutos para grabar la escena. “Leo y yo teníamos que subirnos básicamente a esta carretilla elevadora, alargada y prolongada, y trepar por esta maldita escalera, nos lo vamos a perder, nos lo vamos a perder’, llegamos y de repente, escuchamos: ‘oh, acción’, y durante dos minutos repetimos la escena, Dios nos libre si empezamos a reír, era muy, muy divertido”.