Lolita Cortés es una de las artistas más completas que hay México. Baila, canta, actúa y se da tiempo de participar en los reality shows a los que la invitan como la polémica “juez de hierro”.
El sábado pasado acudió como invitada al programa de entrevistas “El minuto que cambió mi destino, sin censura” conducido por el periodista Gustavo Adolfo Infante donde habló de la relación con su madre, la cantante de música vernácula Lolina Cortés, la cual logró sanar hasta que Lolita cumplió 35 años.
Fue en esta emisión donde la actriz confesó que la anorexia que padeció en su adolescencia fue provocada por unos comentarios que le hizo al bajar del escenario cuando tenía tan solo 17 años.
“Estás muy gorda”
La actriz contó que se encontraba realizando una gira de medios en la que se quitó la chamarra y al terminar las entrevistas su madre le realizó el comentario que la marcó: “Mi madre me dijo: Dolores no te vuelvas a quitar el saco, estás muy gorda”, fueron las palabras que su madre pronunció y por las que Lola dijo “se acabó” y comenzó a bajar drásticamente de peso.
Las duras palabras de su madre llevaron a la actriz a que en el año 1991, pesara 38 kilos: “Yo me juré que jamás mi madre me volvería a decir que yo estaba gorda” fue la delicada promesa que Lolita hizo consigo misma y que la llevó a perder peso.
Lolita explicó que su madre era fisicoculturista, por lo que siempre cuidaba de su físico. “Ella era cuidadosa con la comida, saludable; que te dijera -estás gorda- bajando del escenario, jamas”.
La cantante también confesó que a los 20 años llevó a su pareja a vivir con ella, para hacer enojar a su mamá. Siendo esta la misma razón por la que decidió raparse y tatuarse: “Todo lo hice con tal de darle en la torre a mi familia”.
