En una reciente entrevista realizada para el programa HOY, Ludwika Paleta compartió su experiencia personal en relación con el Body Shaming, revelando cómo ha sido víctima de críticas por su apariencia en distintos momentos de su carrera. Afortunadamente, la actriz ahora se siente agradecida por el creciente respeto y aceptación que existe hacia la diversidad de cuerpos en la sociedad.
Durante la charla, la reconocida actriz mexicana expresó su satisfacción por los cambios que han visto en la industria del entretenimiento respecto a los estándares de belleza. Paleta, quien recibió un fuerte respaldo público tras enfrentar comentarios negativos sobre su físico, subrayó la importancia de fomentar la empatía y de dar prioridad al respeto en lugar de los juicios superficiales.
“Estamos viviendo una época, un momento bastante tranquilo, o sea, en ese sentido, o sea, en el sentido de que hay mucha más aceptación hacia el cuerpo, hay mucha más aceptación hacia lo diferente”, indicó la famosa.
Asimismo, la actriz recordó algunos desafíos que enfrentó durante su crecimiento, entre los que resaltan los comentarios negativos que tuvo por su peso y las apariencias en las revistas.
“En este momento a nadie le puedes decir nada sobre su cuerpo porque está mal visto. Cuando yo estaba creciendo, las revistas decían: ‘ay, ¿ya vieron que Ludwika engordó? Le vimos unos kilitos de más’”, dijo.
En la misma entrevista, Ludwika recordó que, durante épocas difíciles de su carrera, era común que los paparazzi capturaran fotos en momentos vulnerables, como mientras comía, con la intención de mostrarla en una mala posición y generar la impresión de que había ganado peso. Esta práctica de Body Shaming fue una constante en su carrera temprana, según lo explicó la actriz.
Además, Paleta mencionó cómo en varias ocasiones se sintió acosada por fotógrafos cuyo propósito parecía ser dañar su imagen pública. Esta presión constante afectó su bienestar emocional, pero hoy reconoce los avances que e han logrado en cuanto a la percepción de los cuerpos y el respeto a la privacidad de las figuras públicas.
“Te tomaban las fotos los paparazzis y te correteaban y te tomaban la peor foto comiéndote algo y después en una mala posición para que se viera que habías subido de peso”.
Con 45 años de edad, la artista se ha sentido satisfecha en esta etapa de su vida. Además, ha podido gozar de una carrera próspera que ha podido lograr gracias a sus numerosos proyectos, encontrando la felicidad en el ámbito personal y profesional.
“Sí, sí, estoy muy contenta, la verdad es que soy muy afortunada y tengo además las dos cosas que me llenan el corazón y me hacen muy feliz, que es mi carrera, mi trabajo, mis proyectos; y, por otro lado, mi familia, mis hijos”, finalizó diciendo.