La producción dramática Cada minuto cuenta llega a su segunda y última temporada en un marco muy especial: el 40 aniversario de los terremotos del 19 de septiembre de 1985 en la Ciudad de México
La historia retoma las horas posteriores a la tragedia y muestra cómo Pepín y los estudiantes se unen a los voluntarios del CONALEP colapsado, mientras en el Hospital General han pasado 24 horas desde que el doctor Ángel quedó atrapado bajo los escombros. El rescate sigue paralizado por el gobierno, mientras Camila descubre un oscuro secreto que involucra al ejército. Todo ocurre bajo la amenaza latente de un segundo terremoto.
La serie es dirigida por Jorge Michel Grau, Moisés Urquidi y Fernando Urdapilleta. Los protagonista son Osvaldo Benavides, Maya Zapata, Antonio de la Vega, Gerardo Trejoluna, Miriam Balderas, Jesús Zavala, Azalia Ortiz, Lucila Olalde y Luis Fernando Peña.

Las enfermeras, símbolo de resistencia
La serie, que mezcla realidad y ficción, suma al elenco a Miriam Balderas y Azalia Ortiz, quienes representan el trabajo de las enfermeras en el sismo.
En esta temporada, las enfermeras cobran un papel central. Azalia Ortiz destacó que su personaje “está orientado a darle voz a todos esos héroes anónimos que estuvieron al pie del cañón, arriesgando su propia vida para rescatar y salvar lo rescatable, y al mismo tiempo, empezar a sentar nuevas bases de relación entre la sociedad civil y el gobierno”.
Para Miriam Balderas, el papel de su enfermera representa la fuerza de la memoria colectiva: “A mi personaje le toca estar desde el inicio del terremoto, y ahora con la expectativa de la réplica. Eso abre nuevas historias y consecuencias, porque había que recordar y reconstruir edificios emblemáticos de la Ciudad de México, cuidando la sensibilidad del espectador. Todos pasamos por este momento traumático, y era importante hacerlo con respeto”.


Historias inspiradas en la realidad
Miriam Balderas recordó que la primera temporada su personaje estuvo atrapado bajo los escombros, pero en esta última parte vive otro panorama: “Ahora le toca estar afuera, ayudar y sostener a pesar de su tragedia. La serie en general es una historia de reconstrucción, no sólo de las enfermeras, sino de toda la sociedad. Es un homenaje a la gente que perdimos y a la sociedad civil que estuvo presente ante la falta de respuesta del gobierno”.

Un reto actoral y técnico
Las actrices coincidieron en que el uso de la tecnología Virtual Production implicó un gran desafío. “Fue el primer proyecto en toda Latinoamérica en utilizarlo. Era un reto tanto para técnicos como para directores y actores. Pero había una conciencia muy clara de que estábamos contando historias reales de gente que compartió su experiencia personal. Por eso se trabajó con cuidado, sin perder fuerza ni intensidad”, explicó Balderas.

Cuidar la memoria, un acto de ofrenda
El rodaje, señalaron, fue un proceso lleno de emoción y responsabilidad. Ortiz destacó que se trató de un “acto de ofrenda hacia nuestro propio país”, mientras Balderas subrayó que la producción fue cuidadosa con los actores: “Nos sentimos protegidos, porque sabíamos que estábamos tocando historias durísimas. Fue importante transmitir esas fuerzas resilientes que nos hicieron reconstruirnos como sociedad y establecer protocolos de protección civil que aún nos cuidan”.

El cierre de una historia colectiva
La segunda temporada llega con la fuerza de un cierre necesario: más emociones, mayor profundidad en los personajes y un homenaje a la resistencia. “Vale mucho la pena tanto para quienes vivieron aquel sismo como para quienes no lo hicieron”, finalizó Miriam Balderas.
¿Cuándo y dónde verla?
A partir del 12 de septiembre, los diez episodios estarán disponibles en más de 240 países y territorios a través de Amazon Prime Video.