Después de un período de consolidación absoluta, donde se convirtió en una de las voces más poderosas del regional mexicano, Camila Fernández sigue cosechando éxitos. En esta ocasión, su historia familiar y profesional se entrelazan en uno de los momentos más importantes de su carrera: su participación en el primer concierto de Alejandro Fernández en el Estadio GNP Seguros, un escenario que simboliza la continuidad del legado de los Fernández en la música mexicana.
La intérprete llega a esta presentación mientras promueve la versión extendida de su disco La Fernández, que incluye los temas Se Cancela La Llorada, Pudimos Ser y Cuándo Se Ha Visto, además de dos canciones inéditas, entre ellas Culpa Mía, un dueto con El Mimoso que ha sido recibido con entusiasmo por el público.
Culpa Mía: un dueto con fuerza y sentimiento
Camila relata que la idea de grabar con El Mimoso surgió durante un campamento de composición.
“Quería una canción sobre una relación desgastada, donde ambos se echan la culpa, pero que al final habla de abrir los ojos y aceptar que algo ya no funciona”, explica la cantante.
Desde que escuchó la maqueta, supo que esa canción necesitaba la voz de El Mimoso: “Tiene una tecitura estratosférica y una potencia inigualable. Para mí fue lo máximo que aceptara colaborar conmigo. Fue algo muy natural y divertido, fluyó de forma increíble”.
La emoción de compartir el escenario con su padre
Pero el festejo no termina con su lanzamiento musical. Este sábado, Camila Fernández se unirá a su padre, Alejandro Fernández, en el Estadio GNP Seguros, en un concierto que promete ser histórico esta noche del sábado en CDMX. Para ella, el momento tiene un significado muy especial:
“Ha sido un honor que mi papá me invitara a su primer GNP. Es una oportunidad increíble, de pisar ese escenario viendo reflejado el trabajo de mi abuelo y de mi papá. Represento a la primera mujer Fernández que canta mariachi, y me toca abrir ese gran show con mucho orgullo”.
Camila reconoce que la emoción que siente es doble: por compartir el escenario con su padre y por representar a las mujeres de su dinastía: “Estoy muy orgullosa de mi papá como artista y de poder dedicarle unas palabras muy bonitas en un show tan importante”, expresa con emoción.
Un año de crecimiento, aprendizajes y conexión con el público
El 2025 ha sido un año intenso y gratificante para la cantante. Ha alzado la voz por las mujeres, alcanzado los primeros lugares en listas musicales y participado en premios y giras.
“He estado en todos lados, aprendiendo muchísimo. Me ha tocado ajustar mi equipo, crecer en lo personal y lo profesional. Estoy sin parar, pero feliz, porque siento que para esto nací”, aseguró.
Camila también celebra la conexión que ha logrado con sus seguidores.
“En cada show se crea una energía muy especial. Me encanta que la gente ya se sepa las canciones, que las canten con el alma. No me esperaba una reacción tan fuerte, y eso me emociona muchísimo”.
Entre el arte y la maternidad: Cayetana, su inspiración
Fuera del escenario, Camila disfruta su faceta más íntima: la maternidad. Habla con ternura de su hija Cayetana, quien poco a poco muestra su propio brillo.
“Mi hija y yo somos mejores amigas. Tiene oído, canta bonito, pero no le gusta que la grabe. No quiero forzarla, si quiere ser cantante lo decidirá ella. A veces dice que será veterinaria o doctora, y la apoyo en todo”.
Lo que viene para Camila Fernández
La artista promete que lo mejor está por venir. Continuará presentando su álbum La Fernández con más fechas y nuevas colaboraciones.
“Esto se va a poner muy divertido. Mis fans ya saben que ir a uno de mis shows es más barato y más divertido que ir a terapia”, bromeó.
Y agradece, una vez más, a quienes han acompañado su camino: “Gracias a la gente que compra un boleto, que canta conmigo con todo el corazón. Se vienen más conciertos y más música. Nos vemos en algún show... o en el rancho de Doña Cuquita, claro”, concluyó entre risas.