Karely Ruiz se coronó como la gran ganadora de la pelea estelar en Stream Fighters 4, el evento de boxeo amateur organizado por el streamer colombiano Westcol en el Coliseo MedPlus de Bogotá.
Frente a más de tres millones de espectadores en vivo vía Kick y redes sociales, Ruiz derrotó a la colombiana Karina García por nocaut técnico en el tercer round, en un combate que duró los tres asaltos completos y que generó un furor digital inmediato.
Esta victoria marcó el debut triunfal de la regiomontana en el ring, consolidándola como una figura versátil más allá de sus 10 millones de seguidores en Instagram y TikTok.
El enfrentamiento puso a dos influencers sin experiencia profesional pero con meses de preparación intensa. Ruiz, de 28 años y conocida por su contenido de fitness y estilo de vida, entró al ring al ritmo de “El Millonario” de Natanael Cano, luciendo un atuendo tricolor que reflejaba su orgullo mexicano.
García, de 25 años y exconcursante de La Casa de los Famosos Colombia, contó con el apoyo local y un peso inicial de 59 kg contra los 57 kg de su rival. Ambas expresaron nervios previos: Ruiz admitió “un poquito de nervios, pero vengo enfocada en ganar”, mientras García buscaba “demostrar que no todo es apariencia”.
Difunden fotos y videos íntimos de Karley Ruiz tras ganar batalla con Karina García
Lo que parecía una celebración total, en las últimas horas se convirtió en un caos ya que distintos sujetos comenzaron a difundir, mediante redes sociales, fotos y videos íntimos que sube la modelo a su cuenta oficial de OnlyFans.
La joven regiomontana cuenta con más de mil fotos y 300 videos en la página azul que cualquier persona puede ver tras realizar el pago mensual de 16 dólares, es decir 294 pesos mexicanos.
Es importante aclarar que cualquier difusión de contenido explícito podría acabar en delito. La Ley Olimpia es un conjunto de reformas legislativas en México que busca combatir la violencia digital, específicamente la difusión no consentida de contenido íntimo sexual a través de medios electrónicos. Nombrada en honor a la activista Olimpia Coral Melo, quien impulsó la iniciativa tras ser víctima de la distribución de un video íntimo sin su permiso en 2014.