Lupita D’Alessio, la Leona Dormida tuvo una despedida tan emotiva como histórica en la Arena Guadalajara, donde siete mil personas se reunieron para verla por última vez sobre un escenario. Venían de muchos lugares —de la Ciudad de México, de Guatemala y de otros países— para acompañarla en esta última noche. “Arriba el Atlas”, fueron sus primeras palabras, desatando la euforia del público.


Lupita D’Alessio salió al escenario consciente de que este sería el cierre definitivo de su gira Gracias y, con ello, de una trayectoria de 54 años. Uno de los momentos más especiales llegó con “Ni guerra ni paz”, interpretada a dueto con Ernesto D’Alessio mientras el público coreaba cada verso como una plegaria compartida.
En las pantallas LED apareció un mensaje que marcó la atmósfera de nostalgia: “Gracias, Lupita D’Alessio”. Sentada, con unas rosas blancas a su lado y sobre una silla colocada al centro del escenario, la cantante se entregó a su audiencia, integrada también por fans que viajaron desde diversas ciudades solo para verla despedirse.

Con su característico micrófono dorado en la mano, interactuó con la audiencia con humor y complicidad. “A ver si se acuerdan de esta canción… a ver si la puedo cantar”, dijo antes de entonar “No preguntes por quién”. También bromeó al decir: “¿No les molesta que me la pase sentada?”, arrancando risas entre los presentes.
Provocadora, retadora y fiel a su estilo, Lupita D’Alessio volvió a cantarle al amor y al desamor como solo ella sabe hacerlo, demostrando una vez más la fuerza que la convirtió en una de las voces más icónicas de México.
Guadalajara fue el escenario elegido para su última presentación tras tres años de gira. Y ante siete mil personas, interpretó su canción final arriba de un escenario: “Mentiras”. Al terminar, agradeció a sus músicos, a sus mánagers y, sobre todo, a sus fans, quienes le han acompañado generación tras generación.
La Leona Dormida se retira porque considera que es el momento de hacerlo. Se va de los escenarios, sí, pero su legado, sus canciones y su voz seguirán vivos en la memoria de quienes la han amado durante décadas.



