Lo que debía ser el periodo más feliz tras la llegada de sus hijas, se convirtió repentinamente en una batalla por la supervivencia para Martha Higareda. La querida actriz y productora mexicana rompió el silencio este martes a través de sus redes sociales, revelando que tras el nacimiento de sus bebés sufrió una grave crisis de salud que la mantuvo al borde de la muerte debido a un cuadro severo de preeclampsia.
A través de un emotivo mensaje en su cuenta de Instagram, la protagonista de Amarte Duele compartió con sus seguidores los momentos de angustia que vivió.
Según relató Higareda, la emergencia se desató cuando su presión arterial se disparó a niveles críticos de 215, lo que obligó a su esposo a trasladarla de urgencia a la sala de emergencias.
“Estuvieron casi 6 horas intentando estabilizarme. El diagnóstico: preeclampsia”, explicó la actriz, detallando que la situación fue tan delicada que tuvo que regresar a urgencias en dos ocasiones durante el último mes y medio.
Más allá del parte médico, Higareda describió la experiencia desde una perspectiva profundamente espiritual. Durante esas horas críticas en las que los médicos luchaban por controlarle la presión, la actriz aseguró haber tenido una vivencia mística.
“Esa primera noche, en esas seis horas, estuve entre la vida y la muerte. Viví una experiencia espiritual en donde se me mostró qué ocurriría si me quedaba o partía”, confesó.
En medio de la incertidumbre, Martha encontró refugio en su fe. En su texto, atribuye su recuperación a la intervención divina y al poder de la oración: “Sé que Jesús y El Rosario me salvaron. Mi esposo sostenía mi mano y Jesús sostenía mi corazón”. Fue en ese espacio de plegaria cuando su presión comenzó a ceder, permitiéndole, en sus propias palabras, recibir de Dios “la oportunidad de seguir aquí”.
La actriz finalizó su mensaje con un profundo agradecimiento hacia su esposo, quien fue su ancla en el momento más oscuro, así como a su familia, amigos, al equipo médico encabezado por el Dr. Gerardo Barroso y el Dr. Julio César Gil.
“Con profunda gratitud a Dios estoy viva”, concluyó, dejando ver que, tras la tormenta, ahora se enfoca en la recuperación y en la dicha de ver crecer a sus hijas.
Esta revelación generó una ola inmediata de solidaridad en el medio artístico y entre sus fanáticos, quienes han llenado sus redes con mensajes de apoyo y oraciones por su salud.