En los últimos días, el caso de Yolanda Andrade pasó de la preocupación por su salud al foco por la presunta privación de su libertad: versiones que apuntan a que su cuñado tendría una fuerte influencia en las decisiones económicas y personales de la conductora de ‘Montse & Joe’, por lo que ahora, su identidad fue revelada.
De acuerdo con lo compartido por Gustavo Adolfo Infante en el programa ‘De Primera Mano’ y retomado por distintos medios, amigos cercanos a la presentadora le habrían contado que Yolanda ya no puede decidir ni siquiera si se compra una pizza sin pedir permiso. El periodista asegura que la alarma se encendió entre el círculo íntimo de la famosa por el nivel de control que, supuestamente, tendrían su hermana menor, Marilé Andrade, y la pareja de esta.
Mentor, coach e inversionista: el perfil del cuñado de Yolanda
Según ha detallado Infante, Marilé conoció a Sergio Araiza durante una estancia en el sureste mexicano y, con el tiempo, la relación se volvió tan cercana que él terminó mudándose con ella a una de las propiedades de Yolanda. De esta manera, se construyó el perfil público del hombre, a partir de lo que él mismo comparte en redes y LinkedIn: mentor en reprogramación del inconsciente, terapia cuántica, instructor y, al mismo tiempo, especialista en finanzas e inversiones.
En su biografía profesional, Sergio se presenta como director de inversiones y de ventas institucionales, tesorero y gestor de cartera, con estudios en el ITAM. Esa combinación entre coaching “de vida” y manejo de dinero es justamente lo que provoca inquietud entre quienes temen que, desde hace algunos meses, habría tomado un papel protagónico en las decisiones sobre el patrimonio de Yolanda.
Distintos espacios de espectáculos han retomado también versiones de Javier Ceriani y de una revista de farándula que apuntan a que, debido a la enfermedad de la conductora, varios de sus bienes habrían quedado a nombre de Marilé, información que ya conocería Sergio.
Rumores de “secuestro” y lo que sí se sabe hasta ahora
La parte más delicada de la discusión es la palabra “secuestrada”, que algunos programas y medios de comunicación han utilizado para describir la situación de Yolanda. Infante habló incluso de que una amiga cercana le habría dicho que la conductora está “secuestrada” por su hermana y su cuñado, que tendría el celular controlado y que solo se comunica a través de Marilé.
No obstante, no hay ninguna denuncia pública ni investigación oficial relacionada con un secuestro, ni con un presunto abuso sobre sus bienes. Lo único que está plenamente documentado es que Yolanda atraviesa por un proceso médico complejo desde hace años, que recientemente tuvo una recaída, fue hospitalizada y después regresó a casa para continuar su recuperación.
En ese contexto, la propia conductora ha compartido breves mensajes y videos en redes sociales donde se le ve acompañada por su familia, incluyendo a Marilé, sin hacer alusión directa a un conflicto o a un supuesto encierro.