Un juez determinó que existen pruebas suficientes para iniciar un proceso penal contra Lázaro Alan Emmanuel “N”, acusado de asesinar a su madre, Rosalinda “N”, una maestra jubilada encontrada sin vida en su domicilio de la colonia San Pedro Plus, en el municipio de León, Guanajuato.
De acuerdo con la Fiscalía General del Estado (FGE), el crimen ocurrió la noche del 30 de octubre de 2025, cuando el acusado agredió nuevamente a su madre, a quien ya había golpeado y amenazado antes. Esa noche, la atacó hasta provocarle la muerte por estrangulamiento. Dos familiares de la maestra, la madrugada del 31, acudieron al lugar junto con autoridades para ingresar al inmueble.
La Unidad Especializada en Investigación de Homicidios realizó peritajes y entrevistas que permitieron reconstruir lo ocurrido. Tras analizar las pruebas, el juez ordenó que Lázaro permanezca en prisión preventiva mientras se completa la investigación.
La Fiscalía Regional A destacó que este caso es la tercera vinculación por feminicidio obtenida recientemente, resultado del trabajo conjunto entre el Ministerio Público, los agentes de investigación y los analistas de información.
En caso de ser culpable la pena podría ir, de acuerdo con el código penal del Estado de Guanajuato de más de tres a seis décadas en prisión.
El hogar no es un lugar seguro en León
El hecho se suma a un panorama preocupante. Guanajuato ocupa el primer lugar nacional en homicidios dolosos de mujeres, con 201 víctimas en el primer semestre de 2025, mientras que León concentra la mayor violencia, según el Observatorio Ciudadano de León (OCL).
A ello se agrega el Primer diagnóstico sobre la tipificación del delito de abuso sexual, presentado por la Secretaría de las Mujeres, que advierte que Guanajuato es uno de los cuatro estados donde el delito se define con criterios limitados, lo que puede facilitar la impunidad.
La muerte de Rosalinda “N” muestra, una vez más, que el hogar —el espacio que debería ser refugio— sigue siendo el lugar más peligroso para las mujeres en Guanajuato.