La Fiscalía General del Estado de Guanajuato (FGEG) negó haber sido víctima de un ataque informático, luego de que la plataforma Hackmanac difundiera una alerta en la que el grupo de hackers Tekir APT afirmaba haber vulnerado sus sistemas y sustraído más de 250 gigabytes de información sensible.
A través de un comunicado oficial, la Fiscalía informó que “se encuentra realizando una revisión preventiva de sus controles de seguridad”, con el objetivo de garantizar el funcionamiento óptimo de todos sus sistemas informáticos. La institución reiteró su “firme compromiso con la protección de la información, la transparencia y la continuidad en los servicios”, y precisó que toda información distinta carece de validez oficial.
La alerta de Hackmanac —difundida este 11 de noviembre— señala que el grupo Tekir APT asegura haber comprometido todos los subdominios de la FGEG, incluidos los de la oficina del fiscal general y el departamento de policía, además de eliminar copias de seguridad.
Algunos medios locales han reportado que los presuntos atacantes exigen un pago económico a cambio de no publicar la información sustraída, la cual, según versiones no confirmadas, sería revelada el 20 de noviembre si no se cumple con la demanda.
Hackmanac enfatizó que su reporte se basa en información pública recopilada tanto en la web como en la dark web y que no incluye datos confidenciales. Hasta el momento, la autenticidad del supuesto ataque permanece pendiente de verificación.
Adicional, no existe información disponible en línea sobre este grupo de ciberdelincuentes ni de algunos otros ataques que se hayan adjudicado.
Expertos en ciberseguridad explican que los ataques informáticos más comunes contra instituciones públicas incluyen el ransomware, que cifra archivos para exigir un rescate económico; el phishing, que busca obtener credenciales mediante correos o sitios falsos; y las filtraciones de datos (data leaks), que exponen información interna sensible. En todos los casos, la vulnerabilidad suele aprovecharse de fallas en servidores o contraseñas débiles.

