Guanajuato

“No fue accidental”: ataque de jauria en Zoo León apunta a que los perros fueron enviados hacia los muflones

El Zoológico de León denunció que el ataque contra borregos muflones no ocurrió por accidente y que los perros fueron guiados o dejados entrar a su hábitat

El zoo investiga en las cámaras.
Jauria. El director declaró que el ataque habría sido provocado.

El Zoológico de León denunció un ataque que, según sus propios indicios, no pudo ocurrir por azar. Una jauría de perros irrumpió en el área donde habitan los borregos muflones y los atacó, un hecho que la dirección del parque considera producto de una intervención humana, no de un accidente.

Indicios de que alguien facilitó el ataque

El director del zoológico, José Rigoberto Montes Palomares, explicó que hoy se presentó una denuncia formal ante la Fiscalía General del Estado. Señaló que existen elementos suficientes para sostener que los perros no pudieron llegar solos a un área interna del parque, lo que abre la hipótesis de que alguien los llevó, los guió o les abrió el paso para que alcanzaran a los muflones, una especie tranquila y vulnerable.

Montes Palomares calificó el hecho como “un ataque vil” y subrayó que hay señales claras de que “no fue aislado ni fortuito”. En sus palabras, se trata de un evento que “alguien permitió o quiso que ocurriera”, motivo por el cual se están reforzando los protocolos y medidas de seguridad en todo el parque.

No vamos a tolerar ningún tipo de maltrato animal y estaremos llegando hasta las últimas consecuencias.

—  Montes Palomares / Zoo León

Atención a los animales y revisión de accesos

El equipo veterinario atendió a los muflones agredidos mientras la administración revisa accesos, cerraduras, rejas y rutas internas para determinar dónde y cómo se facilitó el ingreso de la jauría. El zoológico aseguró que no existe riesgo para las personas visitantes, pero reconoció que el caso exige una revisión profunda de los sistemas de protección de fauna.


Lo que analizará la Fiscalía

La investigación se centraría en reconstruir la ruta de ingreso de los perros y determinar si hubo participación humana antes, durante o después del ataque. También se evaluará si los hechos configuran delitos relacionados con maltrato animal, daño a especies bajo resguardo y violación de áreas protegidas.

El Zoo de León aseguró que llegará hasta las últimas consecuencias para que este daño intencional contra vida animal no quede impune.

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