Durante recorridos de vigilancia en los municipios de Villagrán y Cortazar, autoridades estatales detectaron dos tomas clandestinas, aseguraron cerca de 48 mil litros de combustible y aproximadamente 3 mil metros de manguera utilizados para la extracción ilícita directamente desde ductos.
La Secretaría de Seguridad y Paz informó que la acción permitió eliminar fuentes de riesgo en zonas rurales y reducir la capacidad operativa de las redes dedicadas al robo de hidrocarburos, una de las economías criminales que más violencia y disputa territorial ha generado en el centro del estado.
Este aseguramiento se suma a un esfuerzo sostenido de la actual administración. En lo que va del gobierno estatal se han asegurado más de 100 millones de litros de hidrocarburos y derivados, una cifra que, de acuerdo con la autoridad, refleja el impacto real de la estrategia CONFIA en el territorio.
El titular de la Secretaría de Seguridad y Paz de Guanajuato, Juan Mauro González Martínez, señaló que las acciones se mantienen de forma permanente y con un enfoque integral:
Seguimos trabajando todos los días con coordinación, inteligencia y responsabilidad para proteger a las familias guanajuatenses.
La dependencia reiteró que la denuncia anónima al 089 sigue siendo una herramienta clave para cerrar espacios a estas actividades ilegales, al permitir la detección oportuna de tomas clandestinas y movimientos sospechosos relacionados con el robo y transporte de combustible.
Las autoridades destacaron que este tipo de operativos buscan no solo el aseguramiento de hidrocarburos, sino también prevenir accidentes, explosiones y daños ambientales, especialmente en comunidades rurales donde los ductos atraviesan zonas habitadas o de cultivo.
EE UU advierte que el huachicol financia a organizaciones criminales
El gobierno de Estados Unidos ha identificado el robo y tráfico de combustible como una de las principales fuentes de ingresos de organizaciones criminales transnacionales, al permitirles financiar estructuras armadas, control territorial y redes logísticas, un contexto que explica la presión y la violencia asociadas al huachicol en estados estratégicos como Guanajuato.